“Esperan a ser golpeadas dos o tres veces para denunciar”: alertan sobre el silencio que puede costar la vida

​La mayoría de las mujeres víctimas de violencia espera sufrir dos o hasta tres agresiones para decidir denunciar, situación que puede ser fatal si no se actúa a tiempo, advirtió la licenciada Gema Hernández Reyna, integrante del Programa de Atención Integral para el Bienestar de las Mujeres, durante una jornada de capacitación a policías municipales sobre violencia digital.

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“Muchas veces las mujeres no quieren denunciar, solo se aíslan, entran en depresión, y cuando buscan ayuda ya es demasiado tarde. Algunas terminan siendo víctimas de violencia grave… o feminicidio”, lamentó.

De acuerdo con Hernández Reyna, la dependencia económica continúa siendo uno de los factores principales por los que una mujer permanece en una relación violenta, pese a los golpes, amenazas o chantajes. “Por eso insistimos en que no deben callar. Ni permitir una sola agresión. Hoy hay instituciones que las pueden apoyar sin costo alguno”, sostuvo.

La especialista explicó que el Instituto Veracruzano de las Mujeres ofrece atención gratuita en las áreas psicológica, jurídica y de trabajo social, y que ahora, gracias al respaldo de la alcaldesa Mariela Hernández García, el programa tendrá un espacio permanente dentro del DIF Municipal para atender a mujeres en situación de riesgo.

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Además de la atención individualizada, el programa también capacita a cuerpos policiacos en temas actuales como la violencia digital. “Queremos que los elementos sepan actuar cuando una mujer les pida auxilio, por ejemplo, si está siendo extorsionada con fotos íntimas. Deben orientarlas correctamente para que denuncien ante la Fiscalía General del Estado”, explicó.

Hernández Reyna puntualizó que la violencia no solo proviene de parejas sentimentales. “También puede ser de amigos o conocidos. Muchas veces, por sexting, las víctimas comparten fotos o conversaciones privadas que terminan expuestas en redes sociales. Por eso existe la Ley Olimpia, que castiga este tipo de delitos digitales”, recalcó.

El llamado final fue directo: no callar, no justificar la violencia y buscar ayuda desde la primera agresión. “Esperar puede costarles la vida”, advirtió.

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