Especialista advierte que la mayoría de las víctimas son comerciantes, y que solo 3 de cada 10 denuncian el ilícito; la información personal expuesta en redes sociales es el principal “gancho” de los delincuentes.
Especialista advierte que la mayoría de las víctimas son comerciantes, y que solo 3 de cada 10 denuncian el ilícito; la información personal expuesta en redes sociales es el principal “gancho” de los delincuentes.
La extorsión telefónica se ha convertido en un delito alarmante a nivel estatal, y Las Choapas no es la excepción, particularmente contra el sector comercial, alertó Braulio César Rivera Zafra, licenciado en criminología y criminalística, y catedrático del Centro Educativo Universitario (CEUNIV) Siglo XXI.
¡Ya tenemos canal de WhatsApp! Únete aquí
En entrevista para el programa En Corto con el periodista Roberto Morales Ayala, Rivera Zafra explicó que los delincuentes explotan la vulnerabilidad emocional de sus víctimas, obteniendo información personal —principalmente a través de redes sociales como Facebook y WhatsApp— para intimidarlas y doblegarlas con amenazas contra sus seres queridos. “Lo que más quiere una persona es a su familia, y si la amenazan por ahí, es fácil que ceda”, advirtió.
El criminólogo detalló que existen extorsionadores improvisados, que actúan con métodos simples pero efectivos para obtener datos, y otros que planifican con precisión, respaldados por una estructura que les permite conocer a fondo a su blanco. En ambos casos, el objetivo es económico o material, sin importarles dañar emocionalmente a la víctima.
Mantente al día con las noticias, únete a nuestro grupo de WhatsApp
Además del impacto económico, la extorsión provoca secuelas como desconfianza en autoridades y personas cercanas, estrés, insomnio y alteraciones emocionales que incrementan la vulnerabilidad, lo que abre la puerta a otros fraudes como los llamados “pacazos” que se han registrado en pleno centro de la ciudad.
Rivera Zafra exhortó a la población a cuidar la información que comparte en redes e internet, evitar enlaces no oficiales y, sobre todo, no entrar en pánico ante una llamada intimidatoria. “Hay casos en que dicen ‘tenemos a tu hijo’, cuando la persona ni siquiera tiene hijos”, ejemplificó.
Enfatizó que la denuncia es la principal herramienta para combatir este delito. Sin embargo, reconoció que el miedo frena a la mayoría: de cada 10 víctimas, apenas tres presentan denuncia formal.
Recordó que el número 089 es la línea directa para reportar extorsiones y que existe una estrategia nacional contra este ilícito que requiere la participación ciudadana.
“La cultura de la denuncia es importante para frenar la extorsión. Sin ella, los delincuentes seguirán aprovechando la vulnerabilidad de las personas”, concluyó.