* Bringas e Inurreta, promesa de compra-venta * Más elementos del fraude en Almendros * Julio Ramos, un fracasado en el PVEM * Guaruras en pleno vuelo * Los excesos de Trujillo * El abogado y el desodorante * Juan de Dios plancha para Erick * Esteban Lara ya se siente alcalde * Jaime Ruiz, el padrino que no apadrina.
Negligente, omiso, irresponsable, Jesús Moreno Delgado atestó de defraudadores el DIF de Coatzacoalcos sin siquiera verificar que sus cédulas profesionales fueran auténticas. Patricia Salcedo Gómez usa una, pero no es suya.
Su corte es fraudulenta, tramposa, ventajosa, voraz, con salarios faraónicos hasta el exceso de cobrar lo que ni un regidor imagina, menos los funcionarios de otras áreas, los preferidos del joaquinismo que palidecen ante el sueldo de la secretaria del director del DIF.
Camina a los tumbos del DIF de Coatzacoalcos, un cero a la izquierda su presidenta, Cristina Cházaro de Caballero, esposa del alcalde, que sólo sirve para el relumbrón, el corte de listón, la foto oportuna, posar junto a su marido o como comparsa de la titular del DIF estatal, Karime Macías de Duarte. Fuera de eso, no existe.
Inexpugnables son los dominios de Jesús Moreno Delgado. Su DIF es su feudo. Ahí se permite todo: la manipulación de los programas asistenciales, que son esencia de la institución, convertido el alfil del joaquinismo —antes en la órbita de Marcelo Montiel, delegado de la Sedesol federal en Veracruz— en un rey sin corona que opera políticamente, que acude a sofocar conflictos y que los deja intactos por falta de credibilidad.
Por caminos del fraude anda el DIF. Un caso, el de Lilia Gema Santiago Ríos, ha permitido la disección de un muerto en vida. Denuncia la madre despojada de su hijo su travesía por una burocracia mañosa, arbitraria, prepotente, mentirosa y, sobre todo, carente de escrúpulos. Hay pus en el DIF y es señal de su putrefacción.
Lilia Gema Santiago Ríos enfrenta a una mafia que falsea datos, que le crea una atmósfera adversa, que emite dictámenes sin haberla valorado, que da por cierto que el marido, Carmen Ramos Rodríguez, con varios matrimonios y seis hijos, padece violencia intrafamiliar. Vergüenza debiera darle recurrir a semejante indignidad con tal de apropiarse del pequeño de dos años. Promiscuo y maltratado. Allá quien le quiera creer.
Su lucha contra el esposo y los aliados de éste en el DIF, le permitieron a Lilia Gema destapar la cloaca de la corrupción.
Halló, por ejemplo, que dos psicólogas carecen de título profesional y cédula; que dos abogados igual; que el procurador de la Defensa del Menor es un funcionario soez, arbitrario y malintencionado; que el director, Jesús Moreno Delgado, conoce y permite violaciones a la ley.
Patricia Salcedo Gómez, una de las favoritas del Rey DIF, se acredita ante instancias superiores y juzgados como “psicóloga perito” y exhibe la cédula profesional 925753.
Pareciera todo normal; pareciera pero no lo es. Esa cédula profesional no es suya. Y hay evidencia.
Su titular es María Leticia Campa Avilés, una maestra normalista egresada de la escuela “Profr. Gregorio Torres Quintero”, en Baja California, y su antigüedad data de 1984, según consta en el Registro Nacional de Profesionistas y en el portal Búho Legal, cuyo link es:
http://www.buholegal.com/925753/.
Constituye, pues, una usurpación de profesión y falsedad de declaraciones ante una autoridad, además que el uso de documentos falsos configuran el delito de fraude procesal.
Pasar por el DIF de Coatzacoalcos es un infierno. Lilia Gema Santiago Ríos lo ha vivido.
Sin valorarla, las psicólogas le dictaminaron estrés postraumático, calidad de “agresora”, “conductas histéricas en epistemología psicológica, que mis conductas y emociones están sobreactuadas o intensamente vividas, con la presunción de que lo realizo para obtener ganancias secundarias de las convivencias con mi menor hijo”.
Tratar con el procurador de la Defensa del Menor, Salvador Hernández Martínez, es peor. Le ha tenido que aguantar un trato soez, agraviante, insultos, prepotencia —“cuál es tu pedo”, le dijo en una ocasión el malviviente— y hasta aliento alcohólico.
“El Chambitas”, como le apodan al procurador, es parcial. Favorece en todo al esposo de Lilia Gema Santiago Ríos, el promiscuo Carmen Ramos Rodríguez, en cuyo juicio salió a relucir que no era éste su segundo matrimonio sino el tercero, y que ocultó cuántos hijos en realidad tenía: seis. Y ahora se dice maltratado el macho.
Complaciente en todo, Jesús Moreno ha permitido el agravio. Sus pseudo psicólogas se ufanan que todo lo hacen con su visto bueno. Y el director del DIF y el procurador Hernández Martínez sostienen que las respaldan en lo que determinen contra Lilia Gema Santiago Ríos.
Y por eso los denunció.
Su caso fue radicado este miércoles 15 en la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos por Servidores Públicos, en Xalapa, acusados de abuso de autoridad, usurpación de profesión, falsedad de declaraciones ante una autoridad. Sólo el uso de títulos y cédulas profesionales falsas derrumbará el juicio por la custodia del menor.
Podrido, el DIF de Jesús Moreno también es fuente de enriquecimiento. Un ejemplo es el salario de su secretaria, Marisol Rubí Moreno Escobar. Gana como ningún otro. De ahí su vida de placer.
Un recibo de nómina deja en claro que las pobrezas no son para el círculo cercano a Jesús Moreno. Marisol Rubí Moreno Escobar ocupa plaza de secretaria, su salario es de 24 mil 280 pesos quincenales y por analogía, gana 48 mil 560 pesos al mes. Chéquese el documento:
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=948662908480445&set=a.164751636871580.46133.100000102355577&type=1&theaterSegún se advierte en el recibo 556, correspondiente a la primera quincena de agosto, su número de ficha es la 16887; su número de CURP es MOEM870108MVSRSR03. Es parte del personal de confianza. Se le paga mediante la partida 5306-02-01298-000-001 con recursos de Plan de Arbitrios.
En el campo de salario diario no hay cifra alguna. Su compensación diaria es de 809.33 pesos. Los pagos se realizan mediante depósito en Banorte, cuenta 067843274, sucursal 0492.
Asidua a los paseos turísticos, Marisol Rubí Moreno Escobar no es de las que guardan prudencia ni mesura.
Sus fotografías aparecen en la red social Facebook en compañía de otras jóvenes, bien ataviadas y maquilladas en el paradisíaco Cancún, la pose para la lente, mientras en el ayuntamiento de Coatzacoalcos hay recorte de personal y falta de pago a proveedores y prestadores de servicios por la supuesta estrechez financiera.
No hay miseria, pues, en el DIF de Jesús Moreno Delgado, aspirante a contrapelo a diputado federal, con un historial de irresponsabilidad, su séquito de oro excesivamente pagado, un equipo de trabajo que lucra con el presupuesto, que recibe salarios extravagantes, que derrocha y lo presume, en una institución que supuestamente es para servir a los que menos tienen.
Denunciado penalmente, sujeto ahora a la acción de la justicia, eventualmente una orden de aprehensión por encubrimiento, Jesús Moreno quiso quedar bien con el marido que infama a su esposa para despojarla del hijo, y permitió el director del DIF que dos psicólogas que no lo son emitieran dictámenes parciales, a sabiendas que carecen de cédula profesional.
Y todavía falta abundar en el caso Cristina Cházaro de Caballero.
Archivo muerto
Francisco Inurreta Fernández es personaje clave en los fraudes de Manuel Bringas Burelo y su “abogado” Samuel Muñoz de la Rosa. Una promesa de compra-venta pasada por la fe del notario Alejandro de la Fuente Beauregard lo sitúa como irreal “posesionario” de más de 6 hectáreas de terreno entre la playa de Coatzacoalcos y la parte norte del fraccionamiento Los Almendros, hoy invadido por los paracaidistas del Conde de Bringas como se autollama el conocido vendelotes. Sabíase que la Sucesión Bringas Burelo se extinguió desde 2011. Sabíase que ese predio le había sido vendido a Gestiones Inmobiliarias Arkitektur en ese año. Sabíase que las ventas posteriores son fraudulentas y aún así Inurreta se comprometió a pagar un millón de pesos, mismos que debería depositar en una cuenta de Banjército. La operación Bringas-Inurreta fue realizada el 20 de junio de 2013 y certificada notarialmente un día después. Medio año atrás, el 21 de diciembre de 2012, Arkitektur había pagado al gobierno de Veracruz por los derechos sobre ese predio y la operación fue ampliamente difundida. O sea, Arkitektur le compró a los hermanos Bringas Burelo y al gobierno de Veracruz, que eran los únicos derechosos. Posteriormente, Francisco Inurreta Fernández suscribió la promesa de compra-venta cuando era público que el predio Almendros Norte no era ya propiedad de Manuel El Conde de Bringas y sus hermanos. Mínimo tendría Inurreta que denunciar por fraude a Manuel Bringas. Y si no lo hace por algo será. El documento del negocio Manuel Bringas-Francisco Inurreta irá a juicio...
Importado de Jesús Carranza, frustrado aspirante a la alcaldía de aquel lugar, Julio Alberto Ramos González es hoy el nuevo líder del Partido Verde Ecologista de México, en Coatzacoalcos. Recoge viruta y desecho el PVEM para regatear la candidatura de 2017 a favor de Mónica Robles Barajas de Hillman, la diputada local. Julio Ramos fue director de Obras por Recuperación en el trienio ivanista, luego encargado de programas sociales en el fallido gobierno facilitador, el segundo peor en la historia de Coatzacoalcos. Hará un año, Julio Ramos pujaba por ser candidato del PRI a la alcaldía de Jesús Carranza y juraba que su partido era el tricolor y ni por error se iría al Partido Acción Nacional, como corría la versión. Desmemoriado, hoy se va al PVEM que es como comprar el cascarón de un huevo podrido. Julio Ramos no es factor ni chifla en el medio político. Su estructura será Grupo Integra, que hasta ahora sólo ha servido para el ridículo. Ha de suponer que en 2017 el PRI le dará la posición de Coatzacoalcos a los falsos ecologistas, encabezados por el fracasado aspirante a alcalde de Jesús Carranza...
Qué es eso de que Jesús Trujillo aborde aviones, rodeado de guaruras, armados hasta los dientes y el personal del aeropuerto de Canticas se lo permita. Ocurrió hace unas semanas. Llegó el contratista de Pemex al avión. Lo seguían dos de sus escoltas, visibles las metralletas. Azorados, los pasajeros cuestionaban qué ocurría. Y él, tan fresco, tan quitado de la pena hacía como que todo era normal. A corta distancia se hallaban en sus asientos el par de guaruras. Fue un vuelo tenso. La línea aérea lo permitió. Dicen que este show terminará cuando Francisco Antonio Colorado Cessa, alias Pancho Colorado, gane la apelación que dé fin a su reclusión de 20 años en la cárcel de Bastrop de Estados Unidos por servirle a Los Zetas para el lavado de dinero, vía compra de caballos de carreras. Pancho Colorado vendrá por lo que fue despojado, incluidos los contratos que ahora tiene Jesús Trujillo...
¿Quién es ese abogado de un jurídico municipal que debió atenderse de emergencia en una clínica local donde le fue extraído un desodorante? Esta vez no hay pistas...
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