* Buganza fija condiciones para respaldar a Yunes * Reunión con el gobernador de Guanajuato, anoche * Cuando los Guízar pretendieron ningunear a don Ramón * Mario Ulises Pereyra, en el ánimo del gobernador * Solicitó licencia el diputado García Bringas * Busca dirigencia panista a Rotter * Deja regiduría Claudio Cahuich
Ya se ve que el doctor Javier Duarte de Ochoa es un imprudente sin cura. Habla, parlotea, alega sin razón y sin mesura, y en el colmo de sus ocurrencias toca fibras sensibles que lo han llevado a traslucir desprecio por el Papa Benedicto XVI, el guía espiritual del catolicismo.
Duarte no es, como el quisiera, un tipo con gracia. Suple esa carencia con una sonrisa congelada y cara de buena gente, la risotada grotesca y una impostada gentileza que alguien, quizá algún día, le dé por auténtica.
No tiene la simpatía que suele acompañar a los políticos de altos vuelos. Tampoco la agilidad mental para responder a las imputaciones hirientes o a los acertijos mayores. No, don Javier Duarte no es un genio de la palabra y sí, en cambio, un personaje de lengua torpe y frases desatinadas.
Hace unas semanas refutó al virtual candidato panista, su rival en la contienda por el gobierno de Veracruz, Miguel Angel Yunes Linares. Este lo había aludido diciendo que en las playas veracruzanas encalló un delfín y que ahí quedó. Duarte reviró: el delfín está sano y estará seis años en suelo jarocho.
Iba bien pero se le ocurrió expresar que prefiría ser un delfín que un perro o un caballo loco. Comparó al panista, poderoso y temido Miguel Angel Yunes Linares con un perro.
Su último desatino —y seguramente no será el último— ocurrió tras registrarse como precandidato del PRI al gobierno de Veracruz. Frente a la prensa que le disparaba preguntas, Duarte de Ochoa habló de la fortaleza del priísmo y no concedió ni una posibilidad al panismo y a su candidato Miguel Angel Yunes Linares.
“Somos un partido —dijo— que ha sabido responder a las necesidades. Somos un partido que se identifica con nuestra gente. Somos un partido que trabaja todo el tiempo, pero sobre todo que da resultados”.
Y de ahí su ilustrísima frase:
“En este sentido, yo no veo cómo nos puedan ganar. Así traigan al Papa, así traigan a quien traigan. En el PRI de Veracruz estamos claros; estamos fuertes porque contamos con el respaldo de nuestra gente”.
Enfatizaba sus palabras con expresiones faciales de autosuficiencia, soberbia pura, aires de grandeza, triunfo anticipado.
Le llovió sobre mojado por vulgarizar la investidura del Papa de los católicos. Sabedor del error cometido, no han faltado quienes expresan que Javier Duarte se ha excusado bajo el argumento de que acentuó mal la palabra papá. O sea, que además el mundo es tonto.
Tratar en esos términos a quien encabeza la religión católica es tan irresponsable como suicida. “Así traigan al Papa...”, dijo don Javier Duarte con aires de grandeza.
Vaya osadía.
Archivo muerto
Reunión entre el gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, y el aspirante panista al gobierno de Veracruz, Gerardo Buganza Salmerón, anoche cerca del PAN nacional, en la ciudad de México.
Dialogaron y luego el gobernador se dirigió a la sede panista. Supuestamente llevó las condiciones de Buganza para doblegarse y respaldar a Miguel Angel Yunes Linares. De ser así, su berrinche no habría más que la palanca para obtener canonjías.
¿Qué pensarán de ello los bugancistas?... Ocurrió hace más de una década. Fidel Herrera era presidente del PRI en Veracruz y Ramón Hernández Toledo era líder priísta en Coatzacoalcos. Sin decir agua, Gustavo Beltrán Guízar, primo del hoy diputado Gonzalo Guízar Valladares, fue designado representante ante los órganos electorales.
Hernández Toledo, ajeno esa decisión, no ocultó su irritación. “Fidel es mi amigo y manda allá, en Jalapa, pero aquí, donde yo sostengo al partido, mando yo”, dijo con las facciones endurecidas. No lo hizo saber; se los soltó a quemarropa, el rostro gélido, a los miembros del Clan Guízar.
Lo supo Fidel y creció su aprecio por el líder petrolero... Mario Ulises Pereyra Esquivel, oriundo de Coatzacoalcos y amigo personal del gobernador Fidel Herrera Beltrán, suma su nombre al de los priístas que intentan llegar a la alcaldía.
Pereyra Esquivel fue presidente local del PRI en los años 80; síndico segundo; coordinador de protección civil; ex diputado local suplente; ex candidato del Partido Revolucionario Veracruzano a la presidencia municipal de Coatzacoalcos; consejero estatal del PRI; ex oficial mayor y ex secretario del Ayuntamiento de Córdoba; subprocurador de Asuntos Indígenas y actualmente es el director del Instituto Veracruzano de la Defensoría Pública. Hombre de amigos y de lealtades, Mario Ulises Peryera se sabe en el ánimo del gobernador Fidel Herrera... Rafael García Bringas solicitó licencia al cargo de diputado federal para contender bajo las siglas del Partido Acción Nacional a la alcaldía de Coatzacoalcos.
Antes del domingo 7, en términos de la convocatoria panista, se estará registrando para la contienda interna. García Bringas no es militante activo del PAN, pero la convocatoria establece que queda abierta la posibilidad a ciudadanos de “reconocido prestigio y honorabilidad”... A quien ya busca la dirigencia panista es al ex alcalde Armando Rotter Maldonado.
Trae una altísima intención de voto y quedaría integrado a la fórmula del PAN para Coatzacoalcos. Rotter se deja querer; viaja al Distrito Federal; recibe ofertas y convence a sus interlocutores.
La estrategia, les dice, es conformar una alianza amplia de partidos políticos para enfrentar al PRI, que incluya al PAN, PANAL, PRD y Partido del Trabajo... Claudio Cahuich Velázquez, regidor décimo en el Ayuntamiento de Coatzacoalcos, solicitó licencia para dejar el cargo.
Buscará ser candidato del Partido Acción Nacional a la diputacion local...