* Angustia entre Gonzalo y socios * La encuesta ya está elaborada; la tiene Fidel y dice MARCOS * El 30 de marzo se registra como precandidato único * Yunes Linares no fue sancionado por spots * Mariano y el predio en disputa * Siendo tesorero trabó embargo al terreno de Quino González * Así acreditó que es propiedad privada * INVIVIENDA miente; dice que ese predio lo donó al Ayuntamiento
Hay evidencia contundente que en la elección del 4 de julio el regreso de los mapaches priístas va más allá de una presunción. En Coatzacoalcos, por ejemplo, la mecánica del fraude ha sido encomendada a tres funcionarios electorales vinculados con el Partido Revolucionario Institucional, alma mater de los comicios desaseados y de la violación a la voluntad ciudadana. Ellos son Roberto Orlando Olivares Carrillo, alias El Chiquis, José Adán Escobedo Morales y Roberto García Alonso.
Dos de ellos —El Chiquis y José Adán— son operadores del ex alcalde de Minatitlán, Raúl Morales Cadena, quien a su vez es pieza clave en el equipo electoral del precandidato priísta a la gubernatura de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa. Olivares Carrillo preside el Consejo Distrital Electoral, y José Adán Escobedo Morales hace lo propio con el Consejo Municipal Electoral.
Cuentan en su historial episodios que los ligan estrechamente al PRI. Olivares Carrillo fue secretario del Ayuntamiento de Minatitlán cuando Morales Cadena era presidente municipal. Tiene una recomendación para ser sancionado por la Procuraduría de Justicia de Veracruz, emitida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos, tras ser acusado de instruir una golpiza a un vecino de Jesús Carranza cuando fungía como agente del Ministerio Público del Fuero Común en aquel lugar.
Adán Escobedo, por su parte, fue director de Desarrollo Económico en el Ayuntamiento de Coatzacoalcos, cuando Iván Hillman Chapoy era alcalde. Tras una serie de conflictos, se separó del cargo y se refugió en Minatitlán, en el equipo de Morales Cadena, quien en 2009 operó en el distrito de Córdoba a favor del delfín fidelista, Javier Duarte El Gordo de Ochoa.
Otro miembro del clan es el coordinador o enlace entre el Consejo General del Instituto Electoral Veracruzano y los consejos municipales del sur de Veracruz, Roberto García Alonso, famoso y aclamado mapache, formado en las filas del maestro Sergio Vera Olvera, mapache mayor, actual vocal del Registro Federal de Electores ante la Junta Local Electoral, con sede en Jalapa, la capital veracruzana.
García Alonso, orquestador de fraudes electorales de alta precisión, ingresó al IFE de Coatzacoalcos en 2001. Luego de ocupar varias plazas, salió de la institución. Encontró trabajo en el Departamento de Castastro, en el Ayuntamiento de Minatitlán, bajo la presidencia de Raúl Morales Cadena, entre 2005 y 2007. Tras la salida de éste, se integró al gobierno de Veracruz. El régimen fidelista le dio tareas de espionaje en la Subsecretaría de Gobierno, en Acayucan, vinculado al C3, la corporación encargada del área de inteligencia en el sur del estado.
Los tres —Roberto Olivares, Adán Escobedo y García Alonso— son intendentes del fraude con que el PRI intenta robar la elección del 4 de julio.
Son los intendentes del fraude duartista.
Archivo muerto
De risa. Transpiran angustia en el equipo del diputado Gonzalo Guízar Valladares. Lideró la carrera por la candidatura priísta a la alcaldía de Coatzacoalcos durante tres años.
Una y decenas de veces expresó, se ufanó, presumió, que traía al gobernador Fidel Herrera en la bolsa; que le cumplía o le cumplía; que sabía a lo que le tiraba si le regateaba la alcaldía. Ahí están los ríos de tinta, el dragoneo, el menosprecio a sus rivales.
Y ahora, cuando el proyecto se apestó, culpan a Marco César Theurel de “evidenciar” al gobernador. ¿Por qué no le reclaman a Fidel Herrera que los haya toreado, burlado y finalmente negado la alcaldía de Coatzacoalcos? Supone Gonzalo Guízar que con una encuesta ganaría la postulación.
La encuesta, por si no lo imagina, ya está hecha. La tiene don Fidel y dice MARCOS. El 30 de marzo se registrará el secretario de Comunicaciones de Veracruz como precandidato único a la presidencia municipal de Coatzacoalcos.
¿Así o más?... No fue sancionado el precandidato del Partido Acción Nacional al gobierno de Veracruz, Miguel Angel Yunes Linares, por el Instituto Federal Electoral. Se le conminó a que en un plazo de 48 horas modifique el término “precandidato” en sus spots de televisión y le asigne más tiempo durante su proyección.
Le matan así el argumento a los voceros de la fidelidad... Menuda bronca en la que se metió el síndico del Ayuntamiento de Coatzacoalcos, Mariano Antonio Moreno Canepa. Siendo tesorero municipal, en 2006, trabó embargo a la propiedad de Joaquín González Menéndez y Aurelio Domínguez Ortiz donde hoy se construye la sexta etapa del malecón costero.
Ahora, en carácter de síndico municipal se presta a sostener que dicho predio no era propiedad privada sino que pasó al patrimonio municipal por una supuesta “donación” del Instituto Veracruzano de Desarrollo Regional y Vivienda (INVIVIENDA). O sea, INVIVIENDA donó un terreno ajeno.
Según documentos hallados en el Registro Público de la Propiedad de Coatzacoalcos, el 1 de agosto de 2006 Moreno Canepa, como tesorero del trienio ivanista, hizo correr una nota marginal a la escritura 10,837 que ampara la propiedad de Joaquín González y Aurelio Domínguez, con una extensión de 23 hectáreas, justo donde hoy se construye la sexta etapa del malecón, obra que se halla bloqueada por los dueños del predio por falta de pago de afectaciones.
En ese entonces Moreno Canepa pretendía imponerle un gravámen de 4 millones 225 mil pesos por adeudo a la tesorería. Casi cuatro años después, dicha propiedad ha sido desconocida por las autoridades municipales. Aseguran que el predio corresponde a una donación de INVIVENDA, lo cual es un auténtico despojo como otros en los que se ha visto involucrado el gerente de la dependencia, Manuel Barclay Galindo. Aquel embargo ordenado por Moreno Canepa será el principal arugumento de los dueños del predio para demostrar que INVIVIENDA hizo otra de las suyas...