* El rollo de Chuayffet  * Negocio millonario  * Las lideresas no trabajan   * Peña Nieto no oyó a la DEA  * El Chapo: lo recapturan o lo matan  * Theurel y la diputación local  * Fidel quiere el Congreso  * DIF: maltrato en un CADI  * Despierten a Callejas  * Elogios a un reglamento que tuvo que ser parchado
 
Qué verbo el de Chuayffet. Ni plazas espurias, ni vendidas, ni heredadas, dice el secretario de Educación Pública, sino concursadas y sometidos los maestros a evaluación porque ese es el fin de la reforma educativa. Qué verbo y qué manera de mentir.

Habla en abstracto Emilio Chuayffet Chemor, cuando la venta de plazas en el magisterio sigue, es fuente de riqueza de líderes y políticos, sirve para someter y controlar, para integrar a un ejército de alfiles que cuidan la industria educativa, un negocio que le da a quienes ejercen el poder y el área sindical.

 

Decía Chuayffet en su conferencia y diálogo “Reforma educativa”, en el Club de Industriales, el 17 de junio pasado:
“Seguirá habiendo evaluación en México, porque quienes piensen lo contrario ofenden al Presidente Enrique Peña, que desde su discurso inicial (como presidente en 2012) señaló: No más plazas espurias, no más plazas vendidas, no más plazas heredadas, sino plazas que pasen por un concurso y evaluación profesional que habilite al maestro” en su empleo.

 

Esas son las de Chuayffet. Alardea con el score a favor y mete la cabeza en la tierra cuando el mundo de le viene encima.
Así ocurre con la reforma educativa. Pregona sus alcances, la evaluación para depurar, seleccionar a los que saben y confinar a los ignorantes, los sin vocación, los negados para enseñar a áreas administrativas.

 

Y lo hace en tono soberbio, tajante, reeditando sus días en la Secretaría de Gobernación, de la que se desplomó moralmente cuando la matanza de Acteal, que pudo evitar porque tenía informes de lo que habría de ocurrir, y no lo hizo.
Quiere engañar Chuayffet con una reforma educativa que va en un contrasentido. Pretende acabar con la manipulación de las plazas, con el negocio de los líderes, con el enriquecimiento de los bandoleros disfrazados de maestros.

 

Baste ver al Centro de Bachillerato Técnico Industrial y de Servicios 113, el CBTIS de Las Choapas, donde no manda la SEP y donde se pitorrean del discurso de Chuayffet, pues la venta de plazas es el pan nuestro de cada día.
Ahí se da el tráfico de empleo, la plaza magisterial sin merecimientos, sin capacidad, otorgadas no por la SEP sino por la mafia sindical que opera sin ley y sin límite.

 

Un documento que circula entre integrantes del SNTE, relaciona al grupo sindical encabezado por las lideresas Themis y Soledad Cobos Reyes, tácitamente dueñas del CBTIS 113, orquestadoras de tomas del plantel, violando los derechos de los alumnos, solapadas por el área administrativa, cuya podredumbre es para plasmarla en libros, y ni qué decir de la mafia callejista, dueña del sindicato magisterial.

Es discurso y rollo el que proclama Chuayffet pues las plazas se venden, a razón de 200 o 300 mil pesos, según sea el postor, en un negocio mínimo de a millón de pesos anuales.

 

Relaciona el documento al personal de base y cuestiona cómo se hicieron acreedores a sus plazas en el CBTIS 113. A lista engloba a dirigentes sindicales e integrantes del plantel.

Citan a Guillermo Alvarado López; Themis y Soledad Cobos Reyes, las lideresas inamovibles y solapadas del CBTIS 113; Laura Jerez Pavón y Sarai Saw Lay Nip Ortiz, “violando leyes, normas y reglamentos, promocionándose sin cubrir los requisitos establecidos”.

Otros dos, Mateo Hernández Jacinto y María del Rosario Sánchez Campos, “quienes entran como docentes de nuevo ingreso sin evaluación ni concurso de oposición, reintegrando el retroactivo y un poco más, retroactivo que no devengaron”.

Nada se podría lograr sin la complacencia de autoridades del área educativa.

Señala el documento a Julio Cuéllar Limón, auxiliar de Servicios Administrativos de la Subdirección de Enlace Operativo de Educación Tecnológica Industrial en el Estado de Veracruz y a Próspero López Delgado, director de Operación de la DGETI, “quienes son presionados por integrantes de la Sección 32 del SNTE, entre en ellos Horacio Rivera Flores, colegiado de asuntos labores del Nivel Medio Superior de la Sección 32; psicólogo Ignacio Ramírez Arellano, secretario de Vivienda de la Sección 32 , quien en el pasado ya se había promocionado a una plaza sin poseer título; Julián Carrillo García, secretario general de la Delegación Sindical del CBTis No. 124 de Veracruz, quien posee una plaza adquirida sin tener título, quienes en la Cd. de México negociaron bajo presión y se permitiera esta corrupción”.

 

Cita otros nombres: Verónica Fierro Canela, jefa de Recursos Humanos de la Subdirección de Enlace Operativo, quien en la Dirección General de Educación tecnológica Agropecuaria, bajo la supervisión de Isabel Flores, jefa de Recursos Humanos de la DGETA, “se elaboraron las Constancias de Nombramiento, con el respaldo del SNTE Nacional por el profesor José Santana; el profesor Carlos Antonio Pérez, representante en la Sección 32 y el profesor Ignacio Rivas”.

 

Es un festín la asignación de plazas en el CBTIS 113 a personal que no cubre el perfil, que carece de méritos, que están negados para la docencia.

Y apoderados del plantel, lo han convertido en su feudo.

Otrora orgullo de los choapenses, el CBTIS 113 pasó de ser escuela modelo a zona de desastre. Prolifera el conflicto sindical, dueñas las hermanas Cobos de menos de la mitad de los integrantes del sindicato, pero respaldadas por la estructura administrativa que les permite apoderarse del plantel, suspender clases, afectar el programa educativo, trastocar el aprovechamiento de los alumnos.

No aguardan a que la reforma educativa determine cómo y a quiénes hay que asignarles las plazas de trabajo. Benefician a sus incondicionales, disponen de salarios, según oficios y denuncia interpuesta en el ámbito judicial.

Viene de lo alto en encubrimiento. Las solapa el área sindical, mientras negocios aledaños a la educación sólo caminan bajo su control. Ocurre así con la cafetería escolar, que representa un mundo de recursos, sin vigilancia y sin control.

 

Tomar el plantel, suspender el programa lectivo, es lo suyo. Uno de sus incondicionales, el director del plantel, Carlos José Estrada Herrera, en eso se especializó. Consta así en actas notariales, cuando del 24 de marzo al 18 de agosto de 2014, tuvo a su cargo que nadie ingresara al plantel. Hoy está encargado de la dirección.

 

Dice Chuayffet que no habrá plazas espurias, ni vendidas, ni heredadas, sino concursadas y sometidos los maestros a evaluación, que esa es la meta de la reforma educativa.

Seguro que sí, con lideresas venales, negociantes, como las hermanas Cobos, que han hecho del CBTIS 113 de Las Choapas un negocio, solapado y encubierto desde la Secretaría de Educación Pública.
Puro discurso el de Chuayffet.
 
Archivo muerto
 
No aminora el vendaval. Libre El Chapo, fugado, ayudado a burlar la ley, encubierto por la narcopolítica, sigue impactando al gobierno de Enrique Peña Nieto. Dos veces alertó la DEA, la agencia norteamericana antidrogas, que intentó fugarse en 2014. Registró que Joaquín Guzmán Loera temía ser asesinado en el interior del penal de máxima seguridad del Altiplano. Y nada se hizo. Hay un túnel. La versión oficial es que por ahí escapó. La versión creíble es que salió por la puerta principal, con escolta de seguridad, sin riesgo porque todo el personal, directivos y custodios, estaban comprados. Decían los priístas que Vicente Fox lo había liberado en 2001 y que Felipe Calderón nunca se empeñó en recapturarlo porque su misión fue salir a ordenar a los cárteles, aunque hizo todo lo contrario. ¿Qué dirán los priístas ahora? Que Peña Nieto lo dejó escapar porque es un narcopresidente, porque su campaña se financió con dinero del trasiego de droga, porque operadores priístas del Chapo con los que se fotografiara el candidato Peña Nieto, en Sinaloa, y que luego fueran detenidos en España, eran la evidencia de que El Señor de las Fugas se la jugó con el PRI. Llegado al poder, Peña Nieto habría olvidado el pacto, encarceló al Chapo, lo refundió en el Altiplano, y nunca imaginó que la mafia lo sacaría de prisión. Débil, menguado, vapuleado, hoy Peña Nieto pasa días negros cuando Francia lo recibe. A nada le sabe una condecoración en la Sorbona de París. Finge disfrutar mientras el rostro trasluce el peso del golpe recibido. No se sabe si El Chapo será recapturado o morirá, dice el periodista Álvaro Delgado, en el portal de Proceso; lo más seguro es que lo maten...

 

Le digan lo que le digan, Marco César Theurel Cotero no se da por muerto. Toca puertas, camina e invierte el ex alcalde de Coatzacoalcos para insertarse en la carrera por la próxima diputación local. Presume su fidelismo, se ufana de estar en la órbita, así sea plutoniana, del secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, el alfil de Peña Nieto, su operador y conciencia, y reconstruye una estructura en colonias, vía promotoras a quienes no deja de financiar, reñidas con el joaquinismo, para asaltar el PRI y asegurar la candidatura. Suena fácil, de no ser por su imagen deplorable que lo obligaría a invertir millones a granel, revertir el recuerdo de su desquiciado ayuntamiento y borrar de la mente que el poder lo transformó para mal. Si es por dinero, Theurel le lleva amplísima ventaja a marcelistas, ivanistas y chagristas. Y en política, como pregona Fidel Herrera, el ex gobernador, lo que implica dinero sale barato. En ese proyecto va Theurel, pero también su esposa Guadalupe Félix Porras, alias Lu-pilla o Lady Gaga, que si no se la da el PRI, está puesta para ir por el Movimiento de Regeneración Nacional, el partido del Peje, de los Robles, de Rocío Nahle, del profe Ríos y de tantos que reclaman un pedazo de la factura...

 

Algo no cuadra. Si el personal de los Centros de Asistencia de Desarrollo Infantil del DIF reciben permanente capacitación, ¿por qué a una menor le fue cortado el cabello por tener liendres? La agresión es evidente. El corte se hizo sin autorización de los padres. Se quejaron. Lo expusieron ante la presidenta del DIF municipal, Cristina Cházaro de Caballero, y ella ordenó el cierre del plantel y la reubicación de los alumnos. Pero algo no cuadra. Si se dio el incidente, faltó capacitación. Lío grande en el DIF, atrapados en el caso la primera dama y el director, Jesús Moreno Delgado, porque el maltrato a menores de edad suele escalar, dimensionarse y reventar políticamente, si no ahora, sí cuando inicien los tiempos de la diputación local...

 

Que alguien despierte a Callejas. Quizá dormido, quizá en Júpiter, dice el líder del magisterio veracruzano, Juan Nicolás Callejas Arroyo, que el reglamento de Tránsito duartista, aprobado por su rebaño y borregos anexas, priístas y aliados, en el Congreso estatal, es un instrumento “de avanzada”. Mejor dicho, de repellada. Calificado de “engendro” por las agrupaciones de taxistas, el Reglamento de Tránsito diseñado por el gobernador Javier Duarte era un asalto en despoblado, con multas estratosféricas, el peatón en la indefensión y la libertad de expresión y la protesta amenazadas. Y ante la movilización social y la réplica ciudadana, el gordobés se replegó, sacó la bandera blanca y resanó las grietas de un reglamento sólo en su reducida imaginación podría ser concebido. O sea, Duarte lo plantea, el Congreso acata y estalla el repudio de los veracruzanos. Rectifica Javier Duarte, vapuleado y masacrado ante la reacción popular, y dice que Callejas que ese reglamento de Tránsito es de “avanzada”. Hay que sacudir al profe. O anda dormido o vive perdido en la Matrix...
 
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