* 300 millones derrochó Duarte en precampaña * Lo acusa el PAN * Alfredo Ramón de Diego se siente el dueño del Registro Público de la Propiedad * Bloquea a quienes investigan sus inmuebles * Desaparecen escrituras y lanzan amenazas * Otro escándalo de Tony Macías, el suegro incómodo * Theurel cambió a Cristina por una vendedora de ostiones

Se vende bien Dante Delgado Rannauro, pero no hay quien lo compre. Diserta sobre un programa de gobierno a 30 años, a realizarse, según su fantasiosa imaginación, en un sexenio. Lanza dardos a su alma mater, el PRI, y promete arrancarle por lo menos 20 puntos en la intención de voto.

Se sabe vencido antes de iniciar la contienda por el gobierno de Veracruz, rebasado por los tiempos políticos, perseguido por su pasado y comprometido con grupos de interés que han hecho de la riqueza veracruzana una cuenta bancaria personal.

Llegó tarde el ex gobernador. Apenas hace unos días el Partido de la Revolución Democrática le dio su aval para ser el candidato de la izquierda en la coalición “Para Cambiar a Veracruz”. Lo obtuvo de manera formal, pero con un perredismo que lo detesta, que le recrimina su doble cara y su oportunismo.

PRI y PAN, Javier Duarte y Miguel Angel Yunes, despegaron sus proyectos, se trenzaron en una batalla que sólo es de dos y ganaron el escenario en que se disputa el gobierno de Veracruz. Recorrieron el estado, expusieron sus propuestas, dominaron el espectro mediático y con sus enconos, la guerra sucia, la denuncia pública, el golpe audaz, polarizaron al electorado. Generaron condiciones a modo —Duarte de la mano de Fidel Herrera y Yunes cobijado por el panismo calderonista— para confeccionar una elección de dos y sólo de dos.

Dante Delgado anda en otra órbita. Se observa rezagado y olvidado. Arrancó a medio gas, apoyado únicamente por su franquicia política, Convergencia por la Democracia, y más tarde por el Partido del Trabajo. Paciente, observó a un PRD empantanado, enfrascado en sus luchas internas, fracturado y con una inmensa mayoría de militantes reacios a secundarlo en su aventura.

Juan Carlos Krausse Rivera, uno de los consejeros nacionales del PRD, le ha advertido que aún siendo el candidato de la alianza de izquierda, no tendrá el apoyo del perredismo. Y algo más: que esos perredistas ya tienen su intención de voto orientado a favor del candidato Yunes Linares.

Krausse Rivera llegó a expresar que con Dante Delgado Rannauro la cosecha del PRD sería apenas de un 5 por ciento de la votación total en la elección del 4 de julio, derivada del repudio a un personaje que sienten ajeno, que les regatea candidaturas a alcaldes y a diputados locales.

Otros líderes, otras tribus del PRD, fueron más allá. Tomaron el control del PRD; manejan a su antojo el Consejo Estatal; destituyen al líder formal, Celso Pulido, y revientan el proceso interno perredista como una muestra de que no es la cúpula quien sostiene el timón del barco sino la tripulación.

Dante Delgado no quiso entender que su alianza con el perredismo había caducado. Terminó en 2004 cuando lo secundaron en su candidatura a la gubernatura de Veracruz y alcanzó un honroso tercer lugar entre tres contendientes.
Hoy camina solo. Convergencia y PT no cuentan.

Equivalen a nada. Carecen de estructuras para enfrentar una elección. Su proyecto se ha montado en la fuerza del PRD. Así llegó al Senado y luego traicionó a Andrés Manuel López Obrador y con su corte convergente avaló la toma de protesta de Felipe Calderón.

Que sea el candidato del PRD no implica que el perredismo lo respalde. El 4 de julio así lo verá.

Archivo muerto

Javier Duarte de Ochoa es algo gastalón. Ha dilapidado 300 millones de pesos en su precampaña y en la construcción de un proyecto fantasioso para ser gobernador de Veracruz.

La denuncia del derroche la hizo ayer el Partido Acción Nacional, en voz de los diputados federales Silvia Monge Villalobos y Miguel Martín López.

Los desglosaron así: 67 millones en camiones para acarreados a sus actos masivos; 48 millones en compra de gorras, playeras y pulseras para su precampaña; 47 millones en renta de jets privados y helicópteros; 18 millones en refrescos y tortas para acarreados; 15 millones mensuales en la renta de mil 500 carteleras; 5 millones en espectáculos y conciertos.

(Parte del otro centenar de millones fue a parar a la prensa fiel, que bajo la mesa y sin recibo obtiene su consabido embute para hallarle virtudes al desangelado candidato priísta).

Duarte de Ochoa rebasó en 4 mil por ciento el tope financiero establecido por el Instituto Electoral Veracruzano... Vaya, pues, con don Alfredo Ramón de Diego, que ya se siente el dueño del Registro Público de la Propiedad de Coatzacoalcos. Sólo él decide quién entra y quién sale del RPP, a quién se le da acceso a las escrituras que ahí se resguardan; qué trámites se pueden o no realizar.

Lo peor es que el registrador, Mario Rafael Contreras Castro, se ha convertido en su fiel empleado, cumplidor de todos sus caprichos. ¿Será que por esa razón han venido desapareciendo algunas escrituras o son extraídas de los libros y mantenidas ocultas, lo cual constituye un grave delito si no se interpone la denuncia correspondiente ante la instancia judicial en forma inmediata?

El ocultamiento de información en el Registro Público de la Propiedad es alarmante y hasta se profieren amenazas veladas —y también abiertas— si alguien le sigue las huellas a las cientos de hectáreas que de manera nada clara aparecen entre las propiedades del rey de las prescripciones positivas.

Hay más... En cuestión de horas se conocerá otra trastada a cargo de Jesús Antonio Macías Yazegey, el suegro incómodo del candidato priísta al gobierno de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa. Una pista: tiene que ver con el Parque Tecnológico Puerto México... Desánimo entre los bugancistas locales por los titubeos del candidato priísta a la alcaldía de Coatzacoalcos, Marcos Theurel Cotero.

Había ofrecido que Cristina González Muñoz, ex panista y ex candidata a diputada local, sería su suplente. Luego se supo que no. Marcos afirma que tiene palabra y que no se retracta; los grupos priístas quieren que ese espacio lo ocupe alguien de casa, con trayectoria.

Theurel, como se ve, camina entre dos fuegos. La decisión se acerca. Hay quienes en el PRI aseguran que Marcos sacrificó a Cristina González, pese a su preparación académica y buena imagen, por una vendedora de ostiones...

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