* El jueves 13, la lista de candidatos del PAN y PRD * Preocupa seguridad del abogado Homero Gutiérrez * Piedras a Wong para que no sea candidato a diputado * Quintanilla y Ramón en tierra de sicarios.

 

Marco César Theurel Cotero parecía estar mejor construyendo puentes —incluso peatonales— en la Secretaría de Comunicaciones de Veracruz, que en la disputa por la alcaldía de Coatzacoalcos, donde el día que no le llueve metralla enemiga, lo acribilla el fuego amigo.

Su última pifia ha sido la difusión de una encuesta, cuyos resultados son tan disparatados como absurdos. Según el sondeo, la intención de voto del candidato priísta a la alcaldía duplica las preferencias que tiene a su favor el abanderado del Partido Acción Nacional, Gonzalo Guízar Valladares. Cifras de locos o de ilusionistas políticos.

Theurel Cotero llegó a la contienda por la puerta trasera. No figuraba entre los aspirantes a la candidatura desde que el puente Murillo Vidal, en Jalapa, se desplomó y amagó con acabar no sólo con sus pretensiones de ser alcalde, sino con su carrera política y hasta con su libertad. Por ese hecho guardó un prudente silencio y libró desde las sombras la embestida de los medios de comunicación.

Se insertó en la contienda por la candidatura cuando ya otros —Gonzalo Guízar Valladares, Joaquín Caballero Rosiñol y Ramón Hernández Toledo— lo daban por muerto. Los apabulló con el aval fidelista y les arrebató un escenario que habían diseñado para sus propios proyectos.

Marcos Theurel camina de la mano de su padrino e impulsor, el alcalde Marcelo Montiel Montiel. Usa la estructura marcelista para ganar adeptos; pregona que será el alcalde de la continuidad; somete a los operadores del marcelismo; suplanta al PRI y su fachada institucional, y en un acto de audacia pacta con un enemigo que en el pasado mediato e inmediato hizo añicos su solvencia moral.

Aún así, Marcos Theurel no ha sido el candidato avasallador con que fue vendida su imagen. Ha caminado a paso lento. Recorre senderos accidentados. Queda bien con unos y mal con muchos más.

Lograr posicionarse en el ánimo del elector también ha sido complicado. Desarrolló una estrategia propagandística de costo millonario y apenas logró con ello un empate técnico con su acérrimo rival, Gonzalo Guízar. Por lo menos una encuestadora revela cómo marcha el ahijado de la fidelidad: el 30 marzo se hallaba 5 puntos por debajo del jefe del Clan Guízar; el 15 de abril, a 4 puntos de distancia; el 30 de abril, 2 puntos abajo del candidato panista.

Frente a la contundencia de las cifras, Theurel ha recurrido al golpe efectista. Promueve la difusión de un sondeo de opinión cuyo resultado es propio para enfermos mentales. Le otorga una ventaja de 2 a uno, que sólo en la mente del señor Theurel y de sus patrocinadores podría anidar.

No se toma ventaja así en una contienda política. El maquillaje de las cifras sirve sólo para el engaño y, pero aún, para engañarse.

Pobre Marcos.

Jueves 13, día crucial para quienes aspiran a las diputaciones locales y alcaldías en Veracruz. En el Partido Acción Nacional van con Gonzalo Guízar Valladares por la presidencia municipal de Coatzacoalcos; José Uribe Pozos y Claudio Cahuich Velásquez serán los candidatos a la diputación local en el distrito XXIX y XXX (Coatzacoalcos urbano y rural, respectivamente).

 

En el Partido de la Revolución Democrática no hay nada para nadie. Amado Cruz Malpica es el candidato a la alcaldía de Coatzacoalcos, avalado por la Comisión Nacional Electoral; gloria Rasgado Corsi fue designada por el Consejo Estatal del PRD, y Armando Rotter Maldonado es el vencedor en la encuesta que realizara la alianza de izquierda (PRD-Convergencia-Partido del Trabajo). El lunes 10 y anoche, la Comisión de Candidaturas de esa coalición sesionó intensamente. Algunos municipios y distritos ya fueron definidos; Coatzacoalcos no.

 

Por el PRD veracruzano, quien llevó la línea fue el nuevo dirigente, Carlos Munguía, enemigo de que el candidato de izquierda, Dante Delgado Rannauro, les marque el rumbo.

 

Si Dante quiere el apoyo del PRD, tendrá que ceder las principales candidaturas a diputados locales y alcaldías a los perredistas; de lo contrario, se acabó el sueño... Preocupación en la Barra de Abogados de Coatzacoalcos luego de que su líder, Homero Gutiérrez Melchor, lograra que se girara orden aprehensión y posteriormente se decretara auto de formal prisión contra el “empresario” Jaime Fidel Quintailla Hayek.

 

Dada la prepotencia del Clan Quintanilla-Hayek; las altanerías del junior de petate, Jaime Quintanilla Hayek, y la historia judicial que los distingue, los profesionales del derecho aseguran que observarán con especial cuidado el desarrollo del conflicto por el uso de documento falso del que se acusa a don Jaime.

 

Por cierto, caló e irritó a muchos abogados los términos en que el representante legal de Quintanilla, Rafael Ruiz Rodrigo presentó en la declaración preparatoria, donde cataloga a Homero Gutiérrez como jefe de una banda que se dedica a la extorsión y de estar coludido con “ciertos medios de comunicación”.

 

Rafael Ruiz, mejor conocido con Petróleo, tendrá su propio Waterloo cuando se revelen sus líos judiciales... Cerradísima la final entre Alejandro Wong Ramos y José Valadés por la candidatura perredista a la diputación local por el distrito de Coatzacoalcos. Wong, respaldado por los ex dirigentes estatales, Rogelio Franco Castán y Celso Pulido Santiago, caminaba en caballo de hacienda hasta que se conocieron diversas publicaciones periodísticas en que se relatan conflictos de dos que, sin embargo, siempre ha salido bien librado.

 

El jueves 13 se sabrá quién de los dos será el candidato... ¿Qué hacían hace apenas unas horas en Villa Juanita, municipio de San Juan Evangelista, los señores Quintanilla y Ramón, sabedores de que aquel es territorio de sicarios? Un viejo conocido suyo, Juan Hillman, no tiene la conciencia tranquila desde que aquel periodista, Javier Juárez Vázquez, fue asesinado.

 

Aquella noche del 30 de mayo de 1984, con el crimen de su principal crítico, se derrumbó su proyecto político...