* Duarte sigue cayendo en la intención de voto * El crimen de Fouad Hakim y el escándalo de las grabaciones de Fidel lo desploman * Focos rojos para el PRI en Acayucan * Regina Vázquez y los 59 millones de daño patrimonial, según el ORFIS * Estrada Montiel finge amnesia * Olvidó que el secretario de Finanzas le paga la campaña * Renato Tronco dice no saber que le grabaron hablando con el gobernador * Diez millones para que no se le rajara a Fidel
Excélsior ha puesto de cabeza a Fidel Herrera Beltrán. Lo exhibió como un transgresor de la ley, manipulador de procesos electorales y operador del gran fraude con el que pretende retener el poder en Veracruz.
Ayer, difundió grabaciones en que el gobernador dialoga con dos candidatos priístas, Renato Tronco Gómez y Marco Antonio Estrada Montiel, les canaliza recursos del erario público y los monta en el operativo para aplastar a la oposición.
Otros audios y su contenido revelan las malas artes del gobernador de Veracruz. Sugiere a un músico “piratearse” una canción del candidato a la gubernatura por la coalición de izquierda, Dante Delgado Rannauro, y ajustarla a la promoción de su delfín, Javier Duarte de Ochoa. Una más tiene que ver con la compra de cien patrullas de policía, cuya vendedora es Elizabeth Torio, esposa del ex panista Gerardo Buganza Salmerón, quien rompiera con el PAN por negarle la candidatura y actuar ahora como esquirol levantándole la mano al doctor Duarte, amén de confrontarse con el panista Miguel Angel Yunes Linares.
Excélsior asestó un golpe de dimensiones mayores en el proyecto fidelista. Legales o no, las grabaciones de las conversaciones del gobernador describen la mecánica del fraude para ganar elecciones; el uso de recursos públicos para desarrollar campañas financieramente desiguales; el atropello a la ley, y en suma, una estrategia de corrupción para perpetuarse en el poder.
De la plática con el candidato a la diputación local por el distrito XXX, Marco Antonio Estrada Montiel, se deprende la implicación del secretario de Finanzas del gobierno de Veracruz, Salvador Sánchez Estrada, a quien le encarga suministrar dinero para el pago de operadores electorales. Hay que darle a todos, dice Fidel Herrera en la grabación.
Es tal la altivez de Fidel Herrera que llega a expresar que una frase digna de los tiranos históricos: “estoy ahorita en plenitud del pinche poder; tengo el gobierno en la mano”.
Con Renato Tronco Gómez, diputado local con licencia y actual candidato priísta a la alcaldía de Las Choapas, la charla es más intensa. Tronco lagrimea sugiriendo que le limpien de contrincantes la contienda interna por la candidatura del PRI, incluso inhabilitándolos. Sugiere no competir y termina cosechando 10 millones de pesos para la conclusión de una carretera, que le debe entregar, haya acuerdo o no, el doctor Javier Duarte de Ochoa, en Coatzacoalcos, en el hotel Fiesta Inn.
Robar elecciones es una expresión contundente, pero que describe la conducta del gobernador Fidel Herrera Beltrán. No compite con limpieza. Trastoca el estado de derecho. Incurre en delitos electorales; en desvío de recursos públicos, definido como peculado electoral. Vulnera la voluntad popular e impone peones y lacayos en alcaldías y diputaciones.
Todo mundo sabía cómo gana las elecciones Fidel Herrera. Sólo que ahora se ha logrado documentar esa conducta ilegal.
Archivo muerto
Cada vez son peores las cifras de Javier Duarte de Ochoa. El 6 de junio traía 7 puntos arriba del candidato panista a la gubernatura de Veracruz, Miguel Angel Yunes Linares, según estimaciones del propio PRI estatal.
Seis días después, tras conocerse el asesinato del empresario Fouad Hákim Santiesteban, la reacción que el crimen provocó en Jalapa, las marchas de protesta y la concentración yunista que congregó, el sábado 12, a más de 30 mil personas frente al palacio de gobierno, se despeñó cinco puntos.
Hoy, una vez que conocieron las grabaciones que demuestran el desvío de recursos públicos para las campañas del PRI, Duarte de Ochoa prácticamente perdió todo su capital político.
La intención de voto va en picada y el delfín fidelista está al borde de la derrota... Acayucan es otro foco rojo para el PRI. Que Regina Vázquez Saut sea un desastre al frente del Ayuntamiento es lo de menos.
En cambio, que el Organo de Fiscalización Superior del Estado de Veracruz le haya detectado 59 millones de pesos de inconsistencias, algunas de ellas con daño patrimonial, le han servido a los pobladores de Acayucan para ejemplificar de lo que es capaz el PRI cuando tiene en sus manos el gobierno.
Lo peor radica en que Regina resultó una pésima alcaldesa, pero su hermana Fabiola, quien ahora intenta regresar a la presidencia municipal, la aventaja en incapacidad para el manejo de los recursos públicos. De ahí que la oposición se le haya crecido y entre la población se perciba la intención de aplicarles un voto de castigo en la elección del 4 de julio...
De risa las respuestas de Marco Antonio Estrada Montiel y Renato Tronco Gómez ante el escándalo provocado por las grabaciones en que se escucha la voz del gobernador Fidel Herrera Beltrán ordenando que les suministren recursos del erario público, uno para su campaña por la diputación local en el distrito XXX de Veracruz, y el otro para que concluya la carretera a Río Playas.
Estrada Montiel salió conque sí habló con el gobernador pero no recuerda que le haya dicho que se pusiera de acuerdo con el secretario de Finanzas, Salvador Sánchez Estrada, para pagarle a los operadores electorales.
Su memoria puede estar averiada, pero el contenido de las cintas es evidencia de cómo le tiran dinero del pueblo a sus proyectos políticos. Renato Tronco dijo inicialmente no conocer el contenido de la grabación; luego admite que sí platicó con el gobernador, aunque lejos de explicar por qué recibió recursos públicos, terminó despotricando contra el candidato panista a la gubernatura, Miguel Angel Yunes Linares.
En el audio se escucha cuando el candidato a la alcaldía de Las Choapas sostiene que son mínimas las posibilidades para el PRI; propone no contender por la presidencia municipal; luego pide que a los otros precandidatos los eliminen de la contienda interna inhabilitándolos; después pide acordar con Javier Duarte, y Fidel Herrera ordena que “Duarte” le entregue 10 millones de pesos para concluir la construcción de la carretera, todo con tal de que no se le raje.
Uno y otro, Estrada Montiel y Renato Tronco, incurrieron en peculado electoral pues sabían la procedencia de los recursos y, aún así, se embarcaron en el delito...