Por una picana o por el pocito,
cualquiera habla. O por una negociación. Hablan ya los secuestradores, el grupo
sanguinario que sembró miedo y dolor en el sur, implicando en su delación al H,
a sus socios, y soltando otros datos, otros nombres, de la banda criminal.
Unas horas después, lo rudo se
les quita. Unas horas en prisión y cuentan todo lo que hay de Hernán Martínez
Zavaleta, su jefe, el Comandante H o El H, tildados por unos de jefe de plaza y
para otros de operador financiero de la célula zeta en el sur de Veracruz.
Horas después de aquella
aprehensión, la del lunes 7, los plagiarios van flojitos y cooperando, soltando
cuanto saben del H y sus contactos, aportando “datos muy importantes para
proceder en contra de otras personas”, refiere el gobernador Miguel Ángel
Yunes.
Son nueve secuestradores, tres
mujeres y el resto varones. Unos cayeron en un operativo en la vieja zona de
tolerancia de Coatzacoalcos, la colonia Benito Juárez Sur, parapetados en una
casa de seguridad. A otros los fueron a buscar a diferentes puntos de la
ciudad.
Cantaron, pues. Y con ello,
seguro, jalaron el gatillo que acabará con su miserable vida, la que se nutre
del dolor ajeno, del llanto ajeno, de la angustia ajena, del dinero que produce
la zozobra de los plagiados y sus familias, o la muerte de aquel por el que no
pudieron pagar.
Vapuleado por la ola de
violencia, Yunes azul dibuja un balance mejor este domingo 13. Destaca dos
hechos: la aprehensión de la banda de secuestradores al servicio del Comandante
H y la aprehensión de la cúpula de la organización 35-Z, incluido su líder, el
50.
Lo de los secuestradores del H
no es tema menor. Lo que hablaron
hará llegar a otros allegados a Hernán Martínez Zavaleta para proceder contra
ellos.
Con los integrantes del Grupo
de Coordinación Veracruz —militares, navales, Policía Federal y estatal,
algunas municipales—, dice Yunes:
“Se tienen evidencias de que se
encuentran vinculados a homicidios, así como a secuestros, y se trabaja para
vincularlos también por estos hechos.
“Esta banda formaba parte del
grupo criminal encabezado por “El H”, quien hoy ya se encuentra detenido.
“Debo significar que han
aportado datos muy importantes para proceder en contra de otras personas”.
Luego apunta:
“Es muy importante darle el
valor y el peso adecuado que ha tenido, para el Estado de Veracruz, la
detención de individuos como Hernán ‘N’, alias ‘El H’, quien se encuentra en
este momento sometido a un procedimiento de carácter legal y que, seguramente,
como consecuencia del mismo, y como consecuencia de las investigaciones que se
siguen llevando a cabo, será sometido a prisión, será sometido, será sentenciado
a prisión por muchos años.
“La detención de este individuo
ha permitido iniciar el proceso de desarticulación de la banda más importante
que operaba en todo el sur del Estado, de la cual, él era cabeza.
“Estos 9 individuos que han
sido presentados ya, que se encuentran ya en proceso judicial, sometidos a
proceso judicial, formaban parte de esta estructura delictiva, que tenía
realmente muy, muy presionada a la zona de Coatzacoalcos y muy atemorizada a la
región sur del Estado”.
¿Son los socios en la
organización o sus ligas con el jet-set y con el poder? ¿O ambas?
Sabíase de tiempo atrás de la
vida del H, su roce social, sus negocios, sus viajes en línea comercial,
charlas interminables con figuras de la vida pública, alcaldes del sur de
Veracruz, diputados, caciques, aspirantes a cargos públicos, empresarios,
constructores.
De todos ellos, los más
allegados resultaron ser los hermanos Chagra. El principal, Roberto Chagra
Nacif, consentido por el régimen fidelista, en el que fue subdirector de Infraestructura
de la Comisión de Aguas del Estado de Veracruz y director de Carreteras
Estatales.
De la mano Fidel Herrera, su
impulsor, su padrino, Roberto Chagra construyó el edificio en que albergó las
instalación es de la Oficina de Hacienda del Estado.
Suponíase que el presupuesto
aplicado se destinaría para realizar obras de remodelación a la oficina
recaudadora, pero de pronto se construyó un edificio.
Ahí, cuando Hacienda del Estado
se mudó, Roberto Chagra esperó pacientemente a que alguien le quisiera rentar.
Y llegó el H.
Dos pisos le dio para instalar
un gimnasio de lujo, el Golden Bull. Y luego se vería con Hernán Martínez
Zavaleta en el restaurant Port House, también de Roberto chagra y par de
socios, donde lo menos que hacían era platicar.
Una vez detenido el Comandante
H, acusado de la masacre de cuatro niños y sus padres en la colonia Nueva
Calzadas, Yunes Linares aludió a empresarios de Coatzacoalcos que convertían en
lícitos los negocios ilícitos del jefe u operador zeta.
Y en esos momentos el gobierno
federal aseguraba los inmuebles de Roberto Chagra Nacif, el protegido de Fidel
Herrera.
Su otro tema se sitúa en Poza
Rica. Ahí, un crimen, detonó una embestida que llevó a la captura de un
sicario, Andrés “N”, alias “El Cinco”, a su jefe, Ricardo “N”, alias “El
Cincuenta”, y el resto de su banda.
Un asesinato, el del empresario
Sergio Juan Tremari Gaya, afuera del un antro, La Bamba, en Poza Rica,
confundido por sus ropas negras con un guardia de seguridad.
Por ese hecho, se llegó al
sicario y cobrador de cuotas, “El Cinco”. Y luego su patrón y a toda la banda.
Yunes proyectó videos y
fotografías en las que evidenciaba cómo el crimen de Tremari Gaya. Ahí los
movimientos del sicario, los rostros, el taxi que lo esperaba para huir.
“Aquí lo ven, transitando hacia
el lugar donde cometió el crimen. Trae en la mano una cartulina, que dejó sobre
el cuerpo de la persona que fue ejecutada, que ahora mismo les comentaremos
cuál fue el móvil para ejecutarlo, y debajo de la cartulina lleva la pistola con
la cual ejecutó a la persona.
“Este individuo era el
principal integrante, era el cabecilla de la banda 35-Z, en Poza Rica, Andrés
’N’. Esa persona se encuentra ya detenida.
“Cámaras de video, que captaron
el hecho criminal, confirmaron la participación de este individuo. El criminal
era jefe de sicarios de la banda conocida como 35-Z, en la región norte del
Estado, con base de operaciones en Poza Rica, Tuxpan y Papantla. Igualmente,
era el encargado de cobrar derecho de piso a distintos establecimientos y
personas en esa región”.
Agrega:
“Es muy importante señalar que
este individuo, “El Cincuenta”, que ya se encuentra detenido, no sólo fue el
autor intelectual del crimen al que ya nos referimos, sino que es el jefe más
importante de la banda 35-Z, no sólo en el Estado de Veracruz, sino, cuando
menos, en cuatro entidades federativas”.
Eso en el norte. De la banda
del H, en el sur de Veracruz, surgen los vínculos del jefe zeta con personajes
a los que, dice Yunes, habrán de proceder.
Sabrá si fue con picana o
pocito, o una negociación, pero los secuestradores del H ya cantaron.
A ver quién cae.
Archivo muerto
Atole con el dedo, atole
tricolor. Sin candados, sin el requisito de militar en el PRI, José Antonio
Meade será el candidato a la Presidencia y nada más. Será, por supuesto, el
gran derrotado en la elección de 2018, aplastado por el repudio social, la
venganza de un pueblo que ha visto cómo Enrique Peña Nieto y su banda saquean
las arcas y violan la ley, cómo mancillan la moral ciudadana con las Casas Blancas
que a la fecha y tras el escándalo, la señora Gaviota, madame Angélica Rivera,
no ha desincorporado de sus bienes, como ofreció, o la inmensa corrupción del
peñanietismo con las obras para los amigos del preciso, o el estancamiento del
país porque nada, absolutamente nada, ni un gramo de sus reformas estructurales
le funcionó a EPN. José Antonio Meade Kuribreña es más de lo mismo. Es operador
del fallido gobierno priista. Nadie con fama de cobrador de impuestos puede
caerle bien al electorado. Nadie desde su posición de Secretario de Hacienda,
pudiendo haberle tendido una mano a Veracruz y no haberlo hecho —se trataba de
extender el periodo de crisis derivado del saqueo duartista— tendrá el voto de
los veracruzanos de bien. ¿Nuevo PRI? Ni en sueños. Es el PRI de siempre, el
que convoca a una asamblea nacional para abrir los candados, suavizar los
requisitos y entregarle la candidatura a Meade, que nunca quiso ser priista.
EPN extraviado en su laberinto… Yeny pega por placer. O por sadismo. Su uniforme
le da valor. Sus compañeros más. Saber que su víctima está esposado, mucho más.
Un video muestra a Yeny Hernández muy madreadora, tirando golpe a puño limpio,
lanzando patadas. Sádica, violenta, la mujer policía de Las Choapas sale al
encuentro de su víctima. El tipo, apodado Chaly, camina escoltado por dos
uniformados. Está inerme, a expensas de esta enferma mental. Camina esposado y
sin manera de evitar la agresión. Son unos segundos, captada en un video a
distancia, Yeny Hernández ya es famosa. Y peor cuando se sabe que no es la
primera vez que golpea detenidos. Yeny es violenta y prepotente, y tiene en el
alcalde Marco Antonio Estrada Montiel a su gran solapador. Más o menos como si
el gobernador de Veracruz siguiera siendo Javier Duarte. Más o menos como si
con Miguel Ángel Yunes la policía fuera igual o peor… Bufones caros los de Saúl
Wade. Uno de ellos, Baltazar González Mendiola, que en su calidad de auxiliar
en sistemas percibe 21 mil pesos mensuales en el ayuntamiento de Minatitlán. Su
nombramiento está suscrito por el pseudoalcalde Héctor Damián Cheng Barragán,
con fecha 1 de abril de 2015, y con ello, dice el texto, “se formaliza la
relación jurídico laboral”. Le otorga nombramiento “definitivo” y lo adscribe
al Departamento de Catastro. Lo incrusta Saúl Wade en su feudo, donde sabe qué
propiedades tienen los minatitlecos, los que pagan predial y los que no, los se
atrasan en cumplir sus obligaciones y a quién los puede exprimir. Baltazar
González es incondicional de Saúl Wade —l’enfant terrible—, el alcalde real
hasta la fecha, el que manda vía TítereCheng, y ahí seguirá porque cuentan los
preclaros miembros de la mafia Wade, Morena les debe haberse quedado con la
alcaldía de Minatitlán, y el futuro alcalde, Nicolás Reyes Álvarez, será un
hueso fácil de roer… Madrugando, Cuitláhuac García ya se ve gobernador. O al
menos con un albazo intentan los morenistas veracruzanos impedir que el
candidato de la alianza Morena-Movimiento Ciudadano-Partido del Trabajo sea
Dante Delgado Rannauro. De gira por Coatzacoalcos, en tareas partidistas, el
diputado federal por Xalapa dice que si se lo proponen, ahí estará, compitiendo
por ser candidato, una vez más, al gobierno de Veracruz. Lo destapa el alcalde
electo, Víctor Manuel Carranza Rosaldo, obvio con la línea de la diputada
federal, Rocío Nahle García, pues nada hace el futuro presidente municipal si
no lleva el visto bueno o la orden expresa de su mentora, impulsora y dueña. Un
evento de capacitación a alcaldes electos, en el salón de la Sociedad
Mutualista, sirvió para el destape anticipadísimo de Cuitláhuac García. Un día
después, el legislador fue nombrado coordinador estatal de organización de
Morena para el proceso 2018. Sólo que frente a Dante Delgado, de mala y pésima
fama, dueño de Movimiento Ciudadano y el único que podría enfrentar al proyecto
de sucesión monárquica de los Yunes azules, Cuitláhuac poco tiene que hacer… Un
alma buena se ha ido. Guadalupe Salgado Gama, mujer de fe, panista que luchó
por un Coatzacoalcos digno, regidora municipal, falleció el sábado 12. Aquejada
por un cáncer al que se enfrentó en diversas etapas de su vida, finalmente la
venció. Se le recuerda en la recomposición del PAN hasta lo que es hoy, un
partido que compite por el poder, lo gana o lo pierde, pero no deja de estar en
el escenario público. Se le leía cada domingo en su reflexión sobre la Palabra
de Dios. Se le veía en congresos diocesanos con su guitarra y sus Cantos o en
su interpretación del Evangelio, cuando llegaban Darío Betancourt o Emiliano
Tardif, o Marilyn Kramar o con monseñor Víctor Philips. Siempre su sonrisa, su
broma, su actitud positiva, su reclamo ante lo injusto, lo que ella concebía
como el bien común. Se le va a extrañar inmensamente. Permanece en el corazón
de quienes la trataron y la amaron. Lupita Salgado, gran amiga. A sus hermanos
y sobrinos, un abrazo solidario. Dios y el tiempo les darán la resignación…
¿Quién es ese contratista de vara alta en Pemex, amigo de la diputada Rocío
Nahle y su esposo, José Peña Peña, al que le auguran un halagüeño futuro una
vez que Morena asuma el poder municipal en Coatzacoalcos? Una pista: se
apellida Quintanilla…