Pedro Hernández es un regidor panista que tiene su muy particular estilo de buscar el “bien común”. Lo hace falseando documentos, trampeando para ser consejero estatal del Partido Acción Nacional e, incluso, traicionando a sus referentes partidistas, sin cuyo apoyo no tendría vida política en Coatzacoalcos.

Hoy está inmerso en un escándalo grande. Se valió de documentos falsos para contender en la elección interna que habrá de conformar el próximo consejo panista estatal, que tendrá la encomienda de elegir a sus nuevos líderes en Veracruz.

Pedro Hernández había faltado a una de las normas del PAN. No pagó cuotas en los últimos meses y ello le impedía contar con una carta de no adeudo, a la que los azules le llaman carta de derechos a salvo, requisito indispensable para realizar el examen que lo validaría para ser elegible en la contienda de aspirantes a consejeros.

Cuando sus compañeros lo vieron en Xalapa y supieron que había presentado una carta de derechos a salvo, lo menos que les causó fue extrañeza. Indagaron y constataron algo que al principio fue una simple sospecha: Pedro Hernández falseó documentación y se llevó al baile a la secretaria general del PAN local, Rosalinda Tolentino Escayola.

Ese día practicaron el examen más de 900 panistas; fueron electos 450. Ellos contenderán por cien espacios en el consejo estatal del PAN, el cual elegirá al próximo comité directivo estatal.

En el documento de no adeudo de cuotas al partido aparecía una firma que no correspondía a la de Rosalinda Tolentino. Se trataba de un documento apócrifo. El caso escandalizó al PAN nacional. Cotejaron el documento con otros escritos enviados por la dirigente panista y pudieron acreditar que el regidor se había pasado de vivo.

De inmediato se tomaron providencias. No sólo ordenaron la cancelación del examen realizado por el regidor panista de Coatzacoalcos, sino que lo inhabilitaron para contender en la elección del próximo sábado 23, donde don Pedrito Hernández aspira a ser consejero propuesto por los militantes activos del municipio de Agua Dulce, en términos de los estatutos del partido albiazul.

Tiene encima, además, el amago de ser denunciado penalmente por la falsificación de la firma de Rosalinda Tolentino y también por el uso ilegal de documentación del Partido Acción Nacional.

A destiempo pagó 28 mil pesos y desde entonces se ha dado a la tarea de mostrar la nueva carta de no adeudo, tomándole el pelo a los panistas de Agua Dulce, con quienes se ha victimizado hasta el grado de asumir una conducta melodramática.

La osadía, sin embargo, no termina ahí. Pedro Hernández se ha valido de sus referentes estatales, Enrique Cambranis y el diputado Federico Salomón, para retrasar la notificación oficial de su inahbilitación. Lo solapan y lo encubren porque suponen que su voto de consejero será a favor de que la actual dirigencia panista sea reelecta.

Cambranis y su corriente han de desconocer que Pedro Hernández también les ha tomado el pelo. Mientras a ellos les jura lealtad azul, el martes 12 de octubre se entrevistaba con el alcalde de Boca del Río, Miguel Angel Yunes Márquez, el más serio rival de Cambranis. La reunión fue en la presidencia municipal y Pedro Hernández se comprometió a otorgar su voto de consejero a favor de Chiquiyunes.

Por lo pronto, Pedro Hernández continúa engañando incautos. Dice que mientras no le notifiquen su inhabilitación seguirá ganando adeptos. Dice también que con Yunes Márquez al frente del PAN estatal algún día será alcalde de Coatzacoalcos o, ya de perdida, diputado.

Así, con trampas, busca don Pedro Hernández el “bien común”.

Es polifacética Gina Domínguez Colio, la jefa de prensa de Javier Duarte de Ochoa y futura coordinadora de Comunicación Social del gobierno de Veracruz, si el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación valida la elección del 4 de julio para gobernador. En un tiempo fue la más valiosa asesora del ex diputado local perredista, Agustín Mantilla Trolle, quien pasara sin pena ni gloria por el Congreso de Veracruz. Bien por doña Gina. No distingue colores ni sabores... No se vale. Hay ediles perversos que le hacen su chamba al seudoperiodista Federico Lagunes Peña sin otro afán que frustrarle su sueño de ser regidor en Coatzacoalcos y comer queso fresco. Maquinan un reajuste de votos luego de la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ordenó al Tribunal Estatal de Elecciones de Veracruz un recuento en el municipio de Coatzacvoalcos. Hay quienes ya urdieron dejar al PRI con sólo cinco regidores en el próximo cabildo; así, el inefable y desacreditado Federico Canino, alias rotwailler, quedaría marginado y convertido en el hazmerrereír de todos. No hay que ser. Nada mejor tener a Pulgoso Lagunes en el aparador; serían tres años de metralla pura... Más de 319 mil pesos le llegó a deber el líder del sindicato de la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento de Coatzacoalcos (CMAS), Hipólito Hernández Manuel, a esa dependencia. Se trata de préstamos personales que en el ejercicio 2008 sumaban esa cantidad y que don Polito no tenía el menor interés en devolver. Así como esa manchita, la auditoría practicada a la CMAS encontró otras más. El líder tiene en su mano la cafetería en que los empleados dejan quincenalmente parte de su salario; la CMAS no le pone trabas para otorgarle préstamos, que luego no le cobra, y de lo único que don Polito no se ocupa es de defender los intereses de los trabajadores. Habría que levantarle el monumento al líder charro; le sobra con qué... ¿Quién es ese periodista al que mes con mes le entrega el gobierno estatal un millón y medio de pesos por su colorido pasquín, una especie de caja de aplausos que únicamente sirve para forrar el bote de la basura o pulir vidrios? El rufián de la pluma cuenta en su haber con avión propio y se da vida de jeque árabe, sin que influya en nada ante la oipinión pública y sin lograr atenuar una sola crítica a su gobernador...