* Otro fracaso de Iván Hillman * No será secretario de Medio Ambiente * Lluvia de basura a Lupe Porras * Inédita protesta contra la alcaldesa de Minatitlán * Más mentiras sobre la salida de Jorge Luis Torres de Olmeca TV * Dicen que fue por “crecimiento profesional” cuando en realidad lo despidieron por la rabietas de uno de los dueños

Ser operador de Marcelo Montiel Montiel hizo de Jesús Moreno Delgado un político tan respetado como temido, tan influyente como odiado, tan poderoso como cuestionado y repudiado.

 

Trepador natural, hoy se encuentra en el umbral de convertirse en el hombre de fuerte del nuevo Ayuntamiento de Coatzacoalcos, no a las órdenes de su líder moral, sino aliado al futuro alcalde, Marco César Theurel Cotero.

 

Típico caso de ingratitud política, Jesús Moreno no ha dudado en morderle la mano a su guía y formador político. Bajo el halo protector de Marcelo Montiel pudo ser director de Gobernación Municipal, en el primer período marcelista en la alcaldía, de 2001 a 2004. Luego, siendo Marcelo oficial mayor del Congreso de Veracruz, lo incrustó en un cargo ejecutivo bien pagado y mejor proyectado en la Legislatura.

 

Más tarde, en 2008, volvió a Coatzacoalcos y nuevamente Montiel, otra vez como alcalde, lo hizo director del DIF Municipal, un especie de virrey con poderes plenipotenciarios, recursos a granel en sus manos, dueño de un equipo de trabajo del que disponía a su antojo y con autoridad para operar políticamente en colonias y congregaciones.

 

Quienes lo conocen, pero sobre todo sus enemigos, saben que de aquel muchacho humilde, habitante de un rancho en Cuatotolapan, en Hueyapan de Ocampo, no queda ni el recuerdo. De ahí salió para estudiar una carrera universitaria, pero optó por dedicarse a algo más perverso y productivo: la política.

 

Quedan sobras y desperdicio moral, devoradas por lo más nefasto. Montado en el marcelismo, del que se decía leal como nadie más, hizo de su actuación pública una exposición de abusos y arbitrariedades, opulencia vil e insultante cuando solía llegar en vehículos de lujo a las colonias pantanosas de Coatzacoalcos, presumiblemente a conocer los problemas de los olvidados, causando agravio, insultando a los jodidos con su implícita soberbia. De ahí que nadie lo soporte y todos lo repudien.

 

Jesús Moreno no es de los que piden, sino de los que exigen que lo pongan donde hay. Marcelo Montiel, pues, le permitió todo. Así se hizo de una vivienda en Los Almendros, obviamente no a su nombre, pero que remodeló y convirtió en una casa de dos plantas a todo lujo.

 

Tuvo una parcela en la congregación de Las Barrillas que por azares del destino hoy son 30 hectáreas de terreno para el cultivo de caña, obtenida mediante una extraña operación, a la que los lugareños conocen como La Cabañita del Amor, lugar en que se realizan fiestones y bacanales.

 

También es un próspero empresario. Se benefició con la obra pública municipal en los últimos tres años, a través de la compañía de un incondicional de apellido Travis. Otro de sus negocios es la renta del estacionamiento del muelle turístico en Las Barrillas, que le deja utilidades de miedo y que no le reporta a nadie.

 

Todo lo obtuvo gracias al manto protector de Marcelo Montiel, incluso la impunidad. Lo que el ex alcalde no imaginaba era que Jesús Moreno hacía un doble juego. En privado, durante la campaña a la diputación federal, en 2009, se reunía con el candidato Iván Hillman Chapoy, donde acusaba que sería objeto de una traición. En público se volvía a asumir marcelista y se rasgaba las vestiduras por su líder y padrino político.

 

Fiel a su naturaleza traidora, terminó fracturando su pacto con Marcelo Montiel. Hábil para la mentira, diestro para el embuste, le tira rollos mareadores a Marcos Theurel, del que será secretario de Gobierno en el próximo Ayuntamiento de Coatzacoalcos.

 

En sí, con Jesús Moreno y su traición al ex alcalde Montiel, el marcelismo ha entrado en crisis. Sus otros operadores, Víctor Rodríguez, Alfonso Morales Bustamante y Miguel Antonio Wong, así como la rémoras de éstos, Víctor Zavaleta, Francisco Chacón Santiago y Manuel Ponce Ruz, andan a la casa de cargos públicos y negocios propios.

 

Víctor Rodríguez, a quien Jesús Moreno relevará en la Secretaría de Gobierno Municipal y quien se ostentaba como el inminente rey de los programas sociales en la Secretaría de Desarrollo Social, en el régimen duartista, fue remitido al área de finanzas, vetado por el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán.

 

Así de fregado anda el marcelismo. Lo de Jesús Moreno se veía venir. Finalmente se arrancó la careta.

Enésimo fracaso político de Iván Hillman Chapoy. Designó Javier Duarte de Ochoa a Víctor Alvarado Martínez como nuevo secretario de Medio Ambiente, cargo que el ex alcalde de Coatzacoalcos sentía creado a su medida. Noche trágica la del martes 14 para Iván El Terrible. Optó Javier Duarte por imponer a un fidelista en la SMA; Víctor Alvarado fue director del programa Tú Decides, del DIF, en tiempos de Rosa Borunda de Herrera. Días antes, Iván Hillman hablaba como secretario de Medio Ambiente; aseguraba que se atenderían tres áreas de crucial importancia; decía estar trabajando cerca del gobernador Duarte y dispuesto a colaborar a favor de Veracruz y de Coatzacoalcos. Pues no, no fue él el afortunado nuevo secretario. ¡Qué tomadura de pelo. Habría que ver qué motivó a Javier Duarte, y a su padrino, Fidel Herrera Beltrán, a jugarle semejante broma a Iván El Terrible...

 

Inédita protesta contra la alcaldesa de Minatitlán. Este lunes 13, por la mañana, tomaron el palacio municipal el síndico y once regidores inconformes, así como personal de confianza, por el aduedo de cuatro quincenas de salarios y aguinaldos; no haber convocado a sesiones de cabildo en un lapso de seis meses; no presentar la cuenta pública de julio a noviembre; entorpecer la entrega-recepción administrativa al nuevo alcalde, Leopoldo Torres, y otorgar contratos en forma irregular a empresas con las que tiene sospechosos vínculos, entre ellas SECORT, asignándole 47 millones de pesos —30 procedentes de un crédito con BANOBRAS y 17 de Petróleos Mexicanos—, sin que la construcción del puente Capoacán sea aún autorizado por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del gobierno federal. Más de 50 empleados y los ediles se apoderaron del inmueble municipal desde las 7 de la mañana; en cartulinas expresaron su repudio al derroche —40 millones de pesos— en imagen personal y en la promoción de su hijo Ciro Félix Porras. Horas más tarde, se unió la Federación Auténtica de Trabajadores del Estado de Veracruz (FATEV), cuyos integrantes exigen el pago de más de 7 millones de pesos por servicios prestados al Ayuntamiento de Minatitlán. Con sus unidades de transporte, la FATEV bloqueó por lo menos diez calles del centro de la ciudad. A ellos se sumaron locatarios del mercado 5 de Febrero, cansados, hartos de las promesas incumplidas de la alcaldesa Lupe Porras y de su gobierno de tiranía. A eso de las 6 de la tarde, se consumó el más humillante agravio que una presidencia municipal hubiera sufrido en la historia de Minatitlán: fueron arrojadas frente a su domicilio, más de dos toneladas de basura, que seguramente prendió focos de alerta en el gobierno estatal. Esa noche mismo se difundió una carta dirigida al gobernador Javier Duarte de Ochoa, en la que le exponen las irregularidades cometidas por Guadalupe Porras David, y donde acusan que el Congreso de Veracruz que terminó sus funciones el 4 de noviembre, nada hizo por intervenir la tesorería municipal. O sea, la solapó. Ayer se destrabó el conflicto con el compromiso de saldar las cuentas pendientes, pero la Legislatura de Veracruz investigará el caos generado por la señora Porras David...

 

Tramposa y mañosa la “explicación” que Olmeca TV da sobre la salida de Jorge Luis Torres Marcos de la dirección de la televisora de cable local. Supuestamente a pregunta del auditorio, en el espacio “La Noticia en el Café”, Sergio Plata explicó, el lunes 13, que Torres Marcos había dejado la dirección del canal y se conmovió tanto que casi se la creemos. “Desafortunadamente para nosotros —dijo Sergio Plata ayer—, afortunadamente para él, en un crecimiento profesional tuvo que retirarse de la compañía. Créame que así como ustedes, nosotros aquí en Olmeca TV lo extrañamos; una persona muy querida, muy profesional. Le deseamos el mayor de los éxitos en lo que termina este año y también en el siguiente al licenciado Jorge Luis Torres, ex director de esta empresa, Olmeca TV”. Patrañas puras. Jorge Luis Torres fue despedido por la rabieta del alcalde electo Marco César Theurel Cotero, uno de los dueños de la televisora, imputándole falsamente un acto de traición; exhibiendo intolerancia, altanería y arbitrariedad. Esa decisión provocó una sacudida entre los dueños reales y los socios prestanombres de Olmeca TV, agravado por enfrentamientos verbales. Torres Marcos no se retiró por “crecimiento profesional”, como afirma Sergio Plata, sino por los desvaríos del Señor de la Bipolaridad. No faltan los puntillosos que afirman que la canción favorita de Sergio Plata es “Mientes tan bien”, aunque en este caso miente tan mal. Otros trabajadores de Olmeca TV ya emprendieron la retirada. Unos más se irán en breve. Los que quedan andan con el diablo adentro por las múltiples imposiciones, disparatadas decisiones y grillas internas. ¿Nombres? Quizá mañana...