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Mussio Cárdenas Arellano

Informe Rojo

Atentado y tortura

05/07/2011 03:26 p.m.
* Irritación en el PAN por votos panistas para endeudar a Coatzacoalcos  * García Carrillo y Mary Lara, como si fueran priístas  * El episodio del marcelista inflado  * Cuando don Rey recibió información y fotos  * Un proyecto sexenal en riesgo  * La trinca infernal de Theurel  * Filtraciones para denostar al diputado Flavino Ríos  * La Corcholata, madrina del Encuentro del Mar  * De la mano de Karime, Joaquín Caballero será alcalde de Coatzacoalcos  * La derrota de López Obrador  * PAN y PRD, a replantear la alianza  * Renuncia Marisol Wong a Egresos en Coatza  * La tormenta que viene sobre Theurel

Sergio López Esquer puede ser un buen militar, pero hoy es el protagonista del peor episodio de inseguridad, racha de incontrolable violencia, que haya aquejado a Veracruz, sobredimensionado con el atentado a su escolta y a su hogar, con saldo sangriento, y la posterior denuncia de tortura de uno de los policías a quien se vincula con los sicarios que perpetraron el ataque.
 
Secretario de Seguridad Pública hasta hace unas horas, López Esquer deja el cargo por la puerta trasera, atrapado en el escándalo, evidenciando la graciosa e indigna huida, tácitamente corrido por la acción del crimen organizado que en un operativo insolente, provocador, atacó la tarde del miércoles 29 de junio, al convoy de sus guardias personales, luego que éstos lo habían dejado en el aeropuerto de Veracruz y que el general abordara el vuelo que lo llevaría a la ciudad de México, donde participaría en el Consejo Nacional de Seguridad Pública.
 
Mientras López Esquer se dirigía al DF, su escolta era agredida a punta de bala por un grupo de sicarios en la carretera Santa Fe-Villarín, presumiblemente con la intención de ultimar al general López Esquer, sin saber los delincuentes el paradero y ubicación del titular de Seguridad Pública de Veracruz. Minutos después, primero vía twitter, luego en avances informativos de la televisión nacional, se sabía del ataque criminal contra López Esquer.
 
Tuvo, pues, el gobernador Javier Duarte de Ochoa que aclarar que su secretario de Seguridad Pública no se hallaba en el lugar de los hechos. Tuvo también la prensa oficialista que intentar matizar el impacto de un hecho tan grave, obviamente sin lograrlo. Se pretendió realizar una empresa imposible: negar el atentado y, desde luego, sus consecuencias.
 
Horas después se sabría que el objetivo de los criminales era el general López Esquer. Lo precisó el comandante de la Tercera Zona Naval de la Secretaría de Marina, Víctor Gamboa Carvallo. La versión difundida por la prensa refirió:
“Un grupo de delincuentes embistió el auto en que viajaban los escoltas en la carretera y posteriormente otro grupo se dirigió a la vivienda, al parecer también del secretario”, ubicado en El Conchal, en el puerto de Veracruz.
 
No fue, pues, un hecho fortuito. Evidentemente, los sicarios iban por el general López Esquer, ya fuera en el trayecto o en su domicilio, en la cual se hallaron impactos de bala.
Según el parte oficial de la Marina, en el evento murieron tres delincuentes y fueron detenidos otros cinco sicarios.
 
Luego se sabría que perdieron la vida dos elementos policíacos. Inicialmente se dijo que eran escoltas de López Esquer; el gobierno de Veracruz respondió que eran policías, no escoltas. Sin embargo, los únicos impactos de bala se hallaron en la camioneta blanca con blindaje nivel 5 del hasta entonces secretario de Seguridad Pública.
 
Ha sido este, también, un festín de errores y marrullerías de la Dirección de Comunicación Social del gobierno de Veracruz. Aletargada, torpe, tramposa y mañosa, la postura oficial tuvo como objetivo negar la realidad: la gravedad de un atentado a la guardia personal de López Esquer; usar a su prensa amaestrada para minimizar el hecho y, lo peor, el desmentido de la vocera del régimen dualista, María Gina Domínguez Colío, quien hasta se dio el lujo de desmentir al comandante de la Tercera Zona Naval, Víctor Gamboa Carvallo, refutando la versión de los disparos en el domicilio del secretario de Seguridad Pública.
 
No terminaron ahí las pifias de Comunicación Social. Entre el jueves 30 de junio y viernes 1 de julio, trascendió la renuncia del secretario de Seguridad Pública. Un día después, el sábado 2, la oficina a cargo de Gina Domínguez llevó al ridículo a su prensa incondicional. Difundió un desmentido sobre la dimisión de López Esquer. Citada como fuente informativa, aseguró que no había tal renuncia, que el gobernador Javier Duarte desconocía el documento con el que López Esquer se separaría del cargo; que esta no se produciría ni en los próximos días ni en las próximas semanas. Era la mentira inútil de "la vocería".
 
Ese día se conoció la denuncia de familiares del policía Saúl Salazar Sánchez, miembro de la Intermunicipal Veracruz-Boca del Río, quien acudió al lugar del atentado perpetrado contra los escoltas del secretario de Seguridad Pública. Su misión era apoyar a los elementos agredidos. Horas después fue aprehendido bajo cargos de ser espía de los sicarios, de haber incurrido en delaciones y proporcionar información al comando del crimen organizado.
 
Su hermana Susana indicó que fueron integrantes del Grupo Fiel quienes detuvieron a Saúl Salazar y que lo sometieron a tortura. Saúl Salazar es de extracción militar. Sirvió al Ejército durante 9 años y posteriormente se incorporó a las corporaciones policíacas. Acusado de tener vínculos con los sicarios, se le mantiene preso en los separos de la policía intermunicipal.
 
López Esquer dejó la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno de Veracruz, el domingo 3. Lo atrapó el escándalo suscitado por el atentado contra su escolta y, presumiblemente, contra su hogar, y desde luego por la denuncia de tortura a la que supuestamente se sometió al policía Saúl Salazar.
 
No fueron esos, sin embargo, los únicos hechos que escandalizaron la gestión de López Esquer. Sus elementos están acusados penalmente de haber asesinado a tres ciudadanos inocentes, supuestamente durante una balacera a la altura del aeropuerto El Lencero, en las cercanías de Xalapa. Joaquín Figueroa Vázquez, Tito Landa Argüelles y Raúl Técatl Cuevas viajaban desde Córdoba, donde laboraban en la empresa Construcciones Santa Clara.
 
Cuando sus familiares fueron informados que estaban muertos, en la Procuraduría de Justicia de Veracruz les mostraron fotografías en que aparecían en un vehículo desconocido; en sus manos se hallaban rifles AK47 y pistolas; estaban golpeados y uno de ellos presentaba incluso el tiro de gracia.
 
Eso motivó que la Secretaría de Seguridad Pública fuera objeto de una denuncia penal, mientras la Procuraduría encubre el crimen con el argumento de que a los tres ciudadanos, que no eran sicarios sino trabajadores responsables de conducta intachable, le resultó positiva la prueba de rodizonato de sodio para determinar si había restos de pólvora en las manos. O sea, les armaron un cuadro delictivo para justificar su asesinato.
 
Prestigiado militar, López Esquer tuvo un difícil arribo a la Secretaría de Seguridad Pública siendo gobernador Fidel Herrera Beltrán. El 27 de octubre de 2008 , durante su primer encuentro con sus subalternos, fue tácitamente secuestrado por un grupo de policías que lo confinaron durante dos horas en la cocina del Cuartel de San José. A su escolta, también miembros del Ejército Mexicano con licencia, la desarmaron, los golpearon y los mantuvieron tirados boca abajo en el patio del lugar.
 
Su salida de la Secretaría de Seguridad Pública se da en medio de una crisis institucional. Su investidura fue vulnerada por el atentado contra su escolta, por la denuncia de tortura a un policía, por la acusación del crimen de tres ciudadanos a los que hizo pasar por sicarios, y por los desatinos en el manejo informativo sobre su renuncia, negada, admitida, torpemente manoseada por el área de Comunicación Social y concretamente por la vocera Gina Domínguez.
 
Queda así vulnerada el área de Seguridad Pública del gobierno de Veracruz, su ex titular denostado. Su relevo es un paso en falso, la evidente fragilidad ante la violencia. Arturo Bermúdez Zurita, el nuevo secretario, tiene el dudoso mérito de profanar la dignidad social, espía del gobierno, cabeza del C-4, el órgano de "inteligencia" del grupo en el poder.
 
Tiene entre sus virtudes la vigilancia de periodistas y el hostigamiento a los enemigos del régimen. Fidelista, construyó su fama en los sótanos del sistema, hurgando en vidas ajenas, trastocando la ética, incurriendo en prácticas insanas.
 
Con Arturo Bermúdez no se avanza. Seguridad Pública retrocede. Veracruz pierde.

Archivo muerto

Irritación en el Partido Acción Nacional en Coatzacoalcos por el voto de dos de sus regidores a favor de que se contrate un crédito con el Banco Nacional de Obras y Servicios BANOBRAS del orden de 500 millones de pesos por el que se terminarán pagando mil 200 millones de pesos, entre capital e intereses, en un lapso de 25 años. Haber secundado al alcalde priísta Marco César Theurel Cotero, le ha generado a los ediles Rafael García Carrillo y María de los Angeles Lara de León una andanada de críticas de la militancia panista, aderezada con suspicaces comentarios de que su voto fue bien cotizado. García Carrillo y Mary Lara son hijo y ex secretaria del actual diputado federal Rafael García Bringas, respectivamente, quien apuntaba a ser candidato del PAN a la alcaldía de Coatzacoalcos hasta que comenzó el coqueteo con los cuadros priístas, rememorando su pasado tricolor. Domesticados, mansos, García Carrillo y Mary Lara forman ya parte del bloque priísta en el cabildo de Coatzacoalcos, alejados de la línea panista, distanciados de los otros cuatro regidores del PAN, actuando como el regidor best-seller, el perredista Ricardo López Carrera, el mejor vendido de la temporada. Hay estupor en el PAN. ¿Cómo justificar que se endeude a Coatzacoalcos por espacio de 25 años con un crédito de 500 millones de pesos por el que se pagarán finalmente mil 200 millones de pesos? ¿Cómo justificar semejante atrocidad siendo miembros del PAN?…
 
Enterado de todo, no hay dato oculto para don Rey. Una llamada le puso una joya informativa en las manos. Minutos antes, un alto funcionario marcelista fue pillado con la "novia" en el auto, inflado a oscuras, no ponchado el vehículo como algún ingenuo supuso. Conoció don Rey de la detención, de las fotos captadas en el fichaje y de otras fotos más. Tomó el teléfono, malintencionado como es; habló con su jefe, el único por encima de su investidura, y dejó la filosa anécdota en el ánimo del irritable personaje. Horas después cundía la alarma en el cuartel general del marcelismo, los focos rojos, la histeria de unos, la rabia del líder y la sonrisa hiriente de otros más. Con ese episodio de desenfreno sexual se frustra un proyecto sexenal, información potencialmente explosiva, letal, de muerte política, material para la venganza de don Rey, datos y gráficas para cuando el reloj electoral lo juzgue mejor. ¿Qué significa el término "intoxicados" en un antidoping? Luego lo platicamos… Ya se sabe quiénes filtraron la información de la caída del diputado local, Flavino Ríos Alvarado, en un baño del restaurant Piquitos, donde se la pasó de maravilla el gobernador Javier Duarte de Ochoa, el pasado miércoles 2 de marzo. El trío de chismosos lleva por nombres Adrián Pérez Martínez, Daniel Jiménez Medina y Jesús Herrera Caro, quienes operan como secretario de Obras, tesorero y jefe de recursos humanos del Ayuntamiento  de Coatzacoalcos. Más tardó en ocurrirle el percance al legislador minatitleco, que la trinca infernal de Marcos Theurel en deslizarlo para que su prensa asalariada lo destazara… Se voló la cerca el alcalde de Coatzacoalcos, Marco César Theurel Cotero. Convirtió a la actriz Carmen Salinas en madrina del festejo istmeño "La Regada de las Frutas". Célebre por su lenguaje cebollero, vulgar frente y tras las cámaras, catedrática del lenguaje lépero, dueña del albur rasposo, doña Carmen anidó en el gusto de un sector del público, inclinado a las películas pica-pica, como Bellas de Noche, Noches de Cabaret, Las Ficheras, La Pulquería, Placeres Divertidos, El Rey de las Ficheras, Las Tentadoras, Burdel, Entre Ficheras anda El Diablo, El Sexo Sentido, A Paso de Cojo, Las Cariñosas, Muñecas de Medianoche, La Tentadoras, Se me Sale Cuando me río, Las Vedettes, Las Modelos de Desnudos, Piernas Cruzadas, El rey del Masaje, Garañón, Solo Para Adúlteros y Sexo por Compasión, entre otras. La Corcholata es el apelativo con el que mejor se identifica a Carmen Salinas, nombre del personaje que interpretó en la cinta La Pulquería, junto a Luis de Alba, y en la cual se da vuelo tocando pezones masculinos. Tener a La Corcholata como madrina en el Encuentro Internacional del Mar, es la mejor puntada que se le podría haber ocurrido al alcalde Marcos Theurel. De lujo…
 
Que Joaquín Caballero haya ganado el aplausómetro en pasado evento del DIF, es lo de menos. Lo relevante ocurrió minutos antes de los aplausos. El ex secretario de Obras Públicas en el Ayuntamiento de Coatzacoalcos 2008-2010, se había ubicado en los asientos más alejados del presidium, distante a muchos, perdido entre la masa. Cuando Karime Macías preguntó por él, no faltó quien refiriera dónde se hallaba. Hasta allá caminó la esposa del gobernador de Veracruz. Habló unos instantes y lo tomó de la mano forzando su andar hasta el presídium.  A menos que los celos políticos lo acaben y venza un conflicto legal en puerta, Joaquín Caballero será el próximo alcalde de Coatzacoalcos. De eso se encarga Karime de Duarte…
 
Para vencer el fraude, la oposición debía ganar de manera CON-TUN-DEN-TE. Así lo recomendaba -y recomienda- Andrés Manuel López Obrador, el líder moral del Partido de la Revolución Democrática, a los suyos. Ocurrió distinto en el Estado de México. Alejandro Encinas, el candidato pejista, fue arrasado en la elección del domingo 3 de julio. Con datos preliminares obtuvo apenas el 26 por ciento de la votación frente al 62 por ciento del priísta Eruviel Avila. Peor aún le fue al candidato del Partido Acción Nacional, Luis Felipe Bravo Mena, con su lejano 13 por ciento. La derrota no sólo es para Encinas; le da de frente al ego y al capital político de López Obrador, empeñado en su estrategia de que para ganarle al PRI no se requería una alianza con el PAN. Sus enemigos -los Chuchos, Amalia García, el Movimiento Democrático  de Izquierda, Marcelo Ebrard- simularon que acuerpaban a Encinas, un perredista respetable y respetado, congruente como pocos, pero que pagó las locuras de su guía e impulsor El Peje. A media campaña, el senador René Arce y el diputado Víctor Hugo Círigo hicieron público su apoyo al priísta Eruviel Avila; siguió el rechazo al candidato pejista, y luego la fractura en la izquierda. A fin de cuentas, lo de menos era que Encinas pudiera ganar la gubernatura del Estado de México. Lo que los perredistas se estaban jugando era la candidatura presidencial, evidenciar la debilidad de López Obrador y lanzar dos señales: hacer patente que es mejor candidato, el jefe de gobierno del DF, Marcelo Ebrard, y retornar el debate sobre la necesidad de ir en alianza con el PAN para enfrentar al PRI en la elección presidencial de 2012, si es que pretenden evitar el regreso del tricolor a Los Pinos. Por lo demás, ya se sabía que el PRI echaría a andar su aplanadora electoral y vía el fraude, ganar la elección. El dilema es cómo y cuando tendrá la oposición la fórmula para inhibir las prácticas fraudulentas y amarrarle las manos al PRI. Quizá algún día…
 
Renuncias en el Ayuntamiento de Coatzacoalcos. Ayer, el alcalde Marco César Theurel Cotero le pidió su renuncia a la directora de Egresos, Marisol Wong Ramos. Pronto se darán otras más. Pronto habrán reacciones, sacudidas e ingobernabilidad política. Don Marcos Theurel sigue trepado en el tobogán de sus incapacidades y de sus errores. En la víspera del proceso electoral federal, lo que hace el alcalde de Coatzacoalcos es equiparable a un suicidio político. No tiene con qué ganar...
twitter: @mussiocardenas

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