Hay actividad notoria
preparando condiciones,
a próximas elecciones
las más grandes de la historia.
Desencadenada euforia
por evento peculiar.
El país se ha de volcar
en procedimientos largos,
por veinte mil o más cargos
en elección popular.
Según sistema moderno
hay cambio presidencial
y en la ciudad capital
jefatura de gobierno.
Mucho movimiento interno
y apoyo de observadores.
Terminarán sus labores
con finales cerrojazos,
al elegir los remplazos
para ocho gobernadores.
Votaciones decisivas
tendrán con todo el ritual,
en el nivel federal
Cámaras Legislativas.
Entre tantas perspectivas
se espera de los estados,
que se extremen los cuidados
sin que hayan hechos violentos,
en cambio de ayuntamientos
y locales Diputados.
Entre tanta ebullición
de puestos por simpatía,
se escucha a Samuel García
quien gobierna Nuevo León.
En una oficial reunión
con presencia acogedora,
se descara sin demora
y en su sitial de poder,
candidatea a su mujer
para que sea Senadora.