No es asunto baladí
aunque se vencen los plazos,
para realizar remplazos
en presidencia del PRI.
“Alito” Moreno allí
quiere imponer condición,
porque su firme intención
es cambiar los estatutos
y en vez que haya sustitutos
acepten su reelección.
Un grupo de expresidentes
nacionales del partido,
con firmeza le han pedido
su renuncia convincentes.
Evidencias suficientes
le refrescan la memoria.
Negativa trayectoria
con las derrotas mayores,
donde ha obtenido los peores
resultados de la historia.
Sin considerar los daños
estatutos va a cambiar,
por reelegir su lugar
tres períodos de cuatro años.
Tiene alrededor rebaños
que lo ven cual semidiós.
Por eso marchará en pos
de un formato que se encargue,
que su mandato se alargue
hasta el dos mil treinta y dos.
También será el instrumento
que apruebe en lo sucesivo,
al comité ejecutivo
contratar endeudamiento.
Y pudiera en un momento
de su vida truculenta,
al no ajustarse la cuenta
de un presupuesto retórico,
que hasta el edificio histórico
del partido ponga en venta.