Todos sabemos porqué
en el recuento final,
perdió a nivel nacional
su registro el PRD.
Patibulario traspié
lo borró del firmamento.
Cierra el establecimiento
porque en elecciones frías,
por las malas compañías
no alcanzó ni el tres por ciento.
Aunque registro local
como institución política,
mantuvo en forma granítica
en la ciudad capital.
Porque en conteo oficial
obtuvo sin discusiones,
tres por ciento en votaciones
que alcanzó por garantías,
ganando unas alcaldías
y también diputaciones.
De pronto Jesús Zambrano
aunque está de muerte herido,
a los restos del partido
pretende meterle mano.
Pero su intrusión de plano
no falta quien recrimine.
Temen que también lo arruine
apoyando su interés,
Ángel Ávila, quien es
representante en el INE.
Al partido en la ciudad
dirige una presidenta,
que previendo la tormenta
ha hablado con claridad.
Zambrano quiere en verdad
a Nora Arias cesada.
No se conforma de entrada
con sepultar al partido,
ahora pretende torcido
hacer otra “chicanada”.