Veracruz está de fiesta
recibiendo visitantes,
de países importantes
que al deporte hacen su apuesta.
Hallarán noble respuesta
de buenos veracruzanos,
pues los vemos como hermanos
dando de si lo mejor,
para ver en su esplendor
Juegos Centroamericanos.
Seguro que gobernantes
también se van a lucir
y de ellos puedan decir
alabanzas importantes.
Muy sonrientes, elegantes
con su semblante jocundo,
no se verá el iracundo
rostro de la sociedad,
por tanta inseguridad
quedando bien ante el mundo.
Hemos de unir nuestras manos
y en un solo corazón,
dar fraterna recepción
a caribeños hermanos.
A los centro americanos
extendemos mano amiga,
pero la conciencia obliga
reconocer que fallamos,
cuando ayuda les negamos
para su hambre y su fatiga.
Cuantos mueren en su intento
de atravesar el país
y nuestro gobierno gris
no les palia el sufrimiento.
Se les niega alojamiento
por ser enorme molestia.
En absoluta inmodestia
se ha promovido un proceso,
para evitarles su acceso
al tren llamado la bestia.