Hacer leyes adecuadas
que en actuales situaciones,
legalicen las acciones
de nuestras fuerzas armadas.
Peticiones pronunciadas
de una manera formal,
ante tribuna oficial
mostrando desasosiegos,
tanto el General Cienfuegos
y el Almirante Vidal.
Han explicado detalles
de todo lo que orilló,
que militares ya no
quieran estar en las calles.
Ni en los montes ni en los valles
por delitos cotidianos.
Porque muchos ciudadanos
que el ejército ha apresado,
se quejan les han violado
en sus derechos humanos.
Necesario es regular
límites en la labor,
del país en su interior
por la tropa militar.
Se han convertido en pilar
y algún control han logrado,
pero al ser tan delicado
e importante su quehacer,
se les debía de ofrecer
marco legal adecuado.
Aun tenemos la esperanza
la ley nos brinde su fruto,
vuelva control absoluto
seguridad y confianza.
Y la memoria se lanza
recordando todavía,
que Peña Nieto ofrecía
a los males soluciones,
cuando pusiera en funciones
su excelsa Gendarmería.