Con interés escuchamos
como noticia del día,
que actuará la Fiscalía
contra Alberto Silva Ramos.
Era uno de tantos “amos”
por el poder seducidos.
Tuvieron tiempos floridos
de derroche y prepotencia,
porque fueron en esencia
de Duarte los consentidos.
Entre otras muchas razones
para estar en este lío,
se le acusa del desvío
de mil quinientos millones.
Muchas investigaciones
por presunto criminal.
Hay desvío presupuestal
que hoy se vuelve trago amargo,
de cuando tenía a su cargo
Comunicación Social.
Ahora por consecuencia
muy firme el Fiscal procura,
aplique Legislatura
el Juicio de Procedencia.
Este juicio es la sentencia
o al menos es el sendero,
de un dictamen valedero
que con la forma debida,
se opte por la medida
de aplicar el desafuero.
Esperemos que proceda
del Fiscal solicitud,
que el proceso en plenitud
marche por firme vereda.
No sea que haya polvareda
o excusas de aquí y allá.
Pues hay temor que quizá
por ser rojo carmesí,
vaya a protegerlo el PRI
como a Tarek Abdalá.