Veracruz es la ciudad
que le da nombre al estado,
con histórico pasado
que habla de su heroicidad.
Por su gran actividad
en el nacional concierto,
tiene ganado por cierto
ese adjetivo legítimo,
por comercial y marítimo
de el más importante puerto.
Verá por el bulevar
sin necesidad de indicios,
la Isla de Sacrificios
frente de Villa del Mar.
Seguro va a disfrutar
en El Playón su balneario.
Para un buen anecdotario
a San Juan de Ulúa le invito,
y haga un viaje a Cancuncito
sin olvidar el Acuario.
Si por el centro es su andanza
visitar es un halago,
el Baluarte de Santiago
igual que el Faro Carranza.
El tiempo muy bien le alcanza
sin gastar mucho dinero.
En La Parroquia al mesero,
su vaso cual campanilla,
le pedirá una canilla
y un espumoso lechero.
El Malecón, Los Portales
con su turismo cautivo,
el innegable atractivo
de edificios señoriales.
Expresiones culturales
con sabor tradicional.
En el Zócalo, habitual
el Son Jarocho y Danzón
y disfrute la emoción
de su alegre Carnaval.
Los jarochos son risueños
por propia naturaleza,
conscientes de la belleza
de sus paisajes costeños.
De los creadores porteños
ves talento en cualquier parte.
Pero siempre se comparte
con el amigo viajero
y en el centro bullanguero
tienen “El Portal del Arte”.