En desquiciada sesión
con muy radical postura,
nombró la Legislatura
Fiscal Anticorrupción.
En la panista fracción
hubo festejos de euforia.
Están cantando victoria
diciendo que fue legal,
haber nombrado al Fiscal
según la convocatoria.
Mostraron hostilidades
partidos de oposición,
afirmando que elección
maniobró ilegalidades.
Van a soltar tempestades
porque argumentos de peso,
marcan que en este proceso
solo elevan estandartes,
con las dos terceras partes
de integrantes del Congreso.
De manera vergonzante
panistas y otras facciones,
siguieron las instrucciones
de nuestro actual gobernante.
Resulta más que inquietante
la dirección de la proa.
Al rumbo de esta canoa
parece hicieron el plan,
Fidel Herrera Beltrán
Y Javier Duarte de Ochoa.
El Gobernador perdió
la cordura y la congruencia,
pues realiza en apariencia
lo que tanto criticó.
Y surgen lo quiera o no
sus palabras anteriores,
cuando expresaba temores
que Duarte en sus lineamientos,
hiciera más nombramientos
pues serían “encubridores”.