Consternación evidente
en las familias poblanas,
por las pérdidas humanas
en un terrible accidente.
Aun no se sabe realmente
de tal suceso el detalle.
Que autoridad no desmaye
y aclare hecho lastimoso,
de Erika Alonso y su esposo
Rafael Moreno Valle.
A Martha E. Alonso, otrora
las pasadas elecciones,
le confirieron funciones
como actual Gobernadora.
En tribunal vencedora
fue investida en tal labor.
Nunca imaginó el horror
que esa tarde sufriría,
al viajar en compañía
de su esposo, el Senador.
Ya hay quien por rencor interno
con oscuras intenciones,
está inventado versiones
para acusar al gobierno.
Lanzan especulaciones
señalando abiertamente,
que eso no fue un accidente
y en el colmo del fastidio,
murmuran de magnicidio
que decretó el Presidente.
Hacen su tragicomedia
y produce solo crítica,
que saquen raja política
de dolorosa tragedia.
Esa actitud no remedia
de oposición aflicciones.
Solo demuestra intenciones
que afloran resentimiento,
volviéndolo el instrumento
de retorcidas acciones.