Hace apenas unos días
se escuchó en conversación,
a Felipe Calderón
cúmulo de tonterías.
Hizo propuestas sombrías
propias de mente cerrada.
Ante una audiencia asombrada,
con líderes de derecha,
propone encender la mecha
de una “rebelión armada”.
A Bolivia y Argentina
sumados con Venezuela,
el planteamiento revela
de manera repentina.
En su cerebro alucina
al tener un plan maestro.
Propone en modo siniestro
extenderlo a otros países,
y en sus propósitos grises
desde luego, incluye al nuestro.
Adicionó dramatismo
diciendo que es menester,
se deba de contener
pandemia del populismo.
En su necio antagonismo
hay inquinas personales.
Expresó con feos modales
que Andrés Manuel en verdad,
no tiene capacidad
y que no está en sus cabales.
Si quiere en forma zorruna
minimizar los pecados,
de uno de sus allegados
que es Genaro García Luna,
no debiera en forma alguna
alardear con tanto dolo.
Porque se hace tonto solo
ya que estuvo en esos jugos,
pero en fin… “pa’ los tarugos
siempre es día de San Bartolo”.