Terrible carga epidémica
la incrementa todavía,
hablar de Samuel García
como figura polémica.
Preparación académica
tiene según su curricula,
pero en alguna matrícula
dejó la instrucción pendiente,
pues muestra constantemente
su perspectiva ridícula.
Enorme molestia externa
que en video se puede ver,
regañando a su mujer
porque “enseña mucha pierna”.
Al ser pareja moderna
asidua a redes sociales,
en transparentes cristales
a detalle es observada
y ha sido muy criticada
su misoginia a raudales.
Mostró doliente actitud
con impacto sorprendente,
relatándole a la gente
su “difícil juventud”.
Casi era una esclavitud
en el seno de su hogar.
Porque con gran malestar
para cobrar su semana,
tenía que ir de mala gana
golf con su padre jugar.
Con un cálculo pueril,
en comentario inaudito
calificó de “sueldito”
cuarenta o cincuenta mil.
Desatinado perfil
induce a la reflexión,
porque en cercana elección
este joven insensato,
pretende ser candidato
a gobernar Nuevo León.