Pretextos y tonterías
han puesto en indecisión,
proceso de extradición
contra Karime Macías.
En diplomáticas vías
se hizo el oficial pedido.
Pero el tiempo ha transcurrido,
más de dos años llevamos,
que se hicieron los reclamos
por México al Reino Unido.
Se argumentaron razones
que la imputan en el lío,
por un posible desvío
de ciento doce millones.
Dicen que hizo transacciones
en acomodo magnífico.
Casi como jeroglífico
descifrar conspiración
y hoy tiene de acusación
cargo de fraude específico.
Pinta oscuros escenarios
orden de aprehensión girada,
contra de empresas fachada
también contra exfuncionarios.
Todos ellos solidarios
con la que huyó de su tierra.
La que al asilo se aferra
en insultante descaro
y con demandas de amparo
se mantenía en Inglaterra.
En reciente decisión
negando amparo formal,
la justicia federal
confirmó su extradición.
Se sostiene imputación
para que pague factura.
Y si afirmó en su escritura
que se merecía abundancia,
le darán con rimbombancia
suntuosa orden de captura.