Ocho de marzo pasado
se celebró a la mujer,
ese prodigioso ser
que un pedestal se ha ganado.
Su poder ilimitado
no se detiene jamás.
Nos confirma ser capaz
de hacer aunque nos asombre,
todo aquello que haga el hombre
y unas que otras cosas más.
Acuden a la memoria
mujeres que en su momento,
gracias a su gran talento
tienen un sitio en la historia.
O no merecen la gloria
y admiración absoluta,
por su sorprendente ruta
Marie Curie ante los jueces,
premio Nobel por dos veces
o Teresa de Calcuta?
También especial mención
a Frida Kahlo y su atril,
Dilma Roussef en Brasil
y Eva Duarte de Perón.
Margaret Thatcher, timón,
Coco Chanel, fantasía,
Indira Gandhi, la guía,
María Callas la soprano,
Edith Piaf en otro plano
y Sor Juana, la poesía.
Donde el Talibán tutela
un sitio especial escala,
la pakistaní Malala
por querer ir a la escuela.
De luz nos deja una estela
toda mujer cuando pasa.
Expectativas rebasa
y juzgando con rigor,
hay que darles más valor
¡ a las que tienes en casa !.