Un hecho sin precedentes
que entre loco frenesí,
en Hidalgo hoy el PRI
quedó sin sus dirigentes.
Se mostraron contundentes
en su decisión final.
Ocho fueron en total
los diputados locales,
que renunciaron formales
con su líder estatal.
El PRI por esta ocasión
queda aunque se avergüence,
en el Congreso hidalguense
sin su representación.
Causó previa conmoción
acto de suma importancia,
cuando en misma circunstancia
ex gober Omar Fayad,
hablando con claridad
renunció a su militancia.
Al externar su postura
expresan disgusto pleno,
contra Alejandro Moreno
por su falta de apertura.
No respeta la estructura
en términos generales.
Consejeros estatales
para nada los valora,
a militantes ignora
y a los líderes locales.
Los “alzados” finalmente
tan solo se han convertido,
sin colores ni partido
en bancada independiente.
Pero el PRI inmediatamente
enfrentó los reflectores.
Dijo de legisladores
la Secretaria indignada,
que no se ha perdido nada
porque eran puros traidores.