​Dentro de algunos días en Veracruz tendremos unas elecciones históricas ya que estaremos votando por quienes nos representaran en las diputaciones locales, federales, senadurías, gubernatura y presidencia de la república, al ser un estado tan grande nuestras problemáticas son muy distintas dependiendo la zona en la que nos encontramos, sin embargo cuando hablamos de violencia de género nos encontramos con que todas las mujeres la hemos vivido de cierto modo, desde la discriminación laboral hasta el acoso callejero.

Los avances en derechos humanos de las mujeres son innegables, basta con mencionar que hace apenas unos 60 años conquistamos el derecho al voto en este país y ahora contamos con la ley de paridad de género en candidaturas, pero nada de ello fue regalado, se lo debemos a miles de mujeres organizadas para luchar por condiciones más favorables para todas las de su género, si no fuera por ellas muy probablemente muchas de nosotras no tendríamos las oportunidades que gozamos hoy, no podríamos contender por un puesto de elección popular, ir a la universidad, ni tener acceso a puestos de toma de decisiones en instituciones privadas, esto nos da una idea del esfuerzo de las generaciones que nos preceden por brindarnos una vida mejor pero también nos sitúa en nuestra responsabilidad por garantizarles condiciones más favorables para su desarrollo a las mujeres del mañana.

Otra realidad innegable es que los crímenes contra las mujeres por la única razón de ser mujeres siguen existiendo y muchos de ellos quedan impunes, desde la violencia institucional que muchas pasamos cuando nos encontramos con trabas para acceder a la justicia, la violencia de tipo sexual que se estima la han vivido cuatro de cada diez mujeres en México, hasta llegar al más aberrante acto que se puede cometer en contra de un ser humano, privarle de la vida, más grave aun cuando asesinan a alguien previa tortura y abuso sexual, cuando quien se siente con derecho a matarte es tu pareja o tu propia familia en tu propia casa, estamos hablando de los feminicidios que suceden a diario en todo el mundo, no podemos hablar de derechos de las mujeres sin antes garantizar su seguridad.

Para acabar con la violencia de género necesitamos la coordinación de la sociedad, gobierno e instituciones, por desgracia las leyes van un paso delante de la cultura que nos rodea, la crianza de los hijos, el cuidado de los enfermos, la limpieza del hogar sigue recayendo exclusivamente en las mujeres, condenando a la mitad de la población mundial a una doble o triple jornada, que cabe mencionar, es sin goce de sueldo.

Afrontar la realidad para con base en ella elaborar políticas públicas es una necesidad apremiante, antes de emitir su voto pregunte a su candidato o candidata cuáles son sus propuestas para logar la igualdad, para atender las dos alertas de violencia de género en el estado y para garantizar acabar con la epidemia de feminicidios en el país, recuerde que la persona que marque en la boleta electoral será quien propondrá las leyes que nos van a regir, la decisión está en sus manos.