Cuando hablamos de la comunidad LGBTTTI nos referimos al grupo conformado por personas con prácticas o preferencias sexuales específicas.
Cuando hablamos de la comunidad LGBTTTI nos referimos al grupo conformado por personas con prácticas o preferencias sexuales específicas.
Cuando hablamos de la comunidad LGBTTTI nos referimos al grupo conformado por personas con prácticas o preferencias sexuales específicas que se diferencian de lo que se asocia con ser heterosexual, sus siglas hacen referencia a lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgénero, travesti e intersexuales, por desgracia la mayoría de sus integrantes se enfrentan a diario con discriminación y falta de acceso a los derechos humanos básicos, todo ello con una aceptación social alarmante, tanto así que muchos de los crímenes de odio cometidos contra ellos quedan en su mayoría impunes.
Según los datos proporcionados por el Observatorio de Personas Trans Asesinadas, México es el segundo país más peligroso a nivel mundial para las personas transgénero, quienes en América Latina se calcula tienen una esperanza de vida de solo 35 años, esto debido a los altos índices de asesinatos a los que se enfrentan por el simple hecho de ser distintos y que usualmente los asesinos no enfrentan consecuencias legales, dando una especie de licencia no escrita por parte de las autoridades para que se sigan cometiendo estos crímenes.
Privar de la vida a otra persona es la forma más extrema y visible de violencia a la que se puede llegar, sin embargo, hay varios niveles de violencia previos que muchas veces nos pasan desapercibidos, como la constante discriminación ejercida hacia esta comunidad, reduciendo las oportunidades tanto escolares como laborales y orillándoles en muchas ocasiones al trabajo sexual como única alternativa para subsistir, dejándoles en una condición aún más vulnerable; otra situación invisibilizada que enfrentan las personas intersexuales (quienes son erróneamente llamadas hermafroditas), es ser sometidas cirugías desde muy temprana edad para alterar sus genitales, lo cual puede dañarles de manera permanente sin realmente tener una justificación médica sólida, actualmente este tipo de operaciones son muy cuestionadas y se considera vulneran el desarrollo sexual del individuo.
Como sociedad tenemos una deuda enorme con la comunidad LGBTTI, tanto en impartición de la justicia como en el reconocimiento de sus derechos, no podemos dejar de lado los avances que se han conseguido después de años de lucha, pero estos han sido a marchas forzadas y muy graduales, como en la mayoría de los casos la información nos es de gran ayuda, quitar los prejuicios que les rodean y aceptarnos como seres humanos con el mismo valor es indispensable para acabar con la desigualdad, mientras existan oprimidos en el mundo ninguna persona será completamente libre.