​“La historia la escriben los vencedores”, una frase que algunas personas atribuyen al escritor George Orwell y otras más a Winston Churchill, hace referencia a que siempre los hechos serán narrados a conveniencia de las personas que están en el poder y de cómo desean que las próximas generaciones recuerden ciertos sucesos, un ejemplo de ello es como los romanos consideraban “bárbaros” a los pueblos que les hacían frente, les tildaban de inhumanos e ignorantes,  hoy día en muchos lugares se les recuerda con ese nombre, bárbaros, aún si sabemos todas las atrocidades cometidas por el imperio romano en su afán de conquistar territorios y consolidarse como potencia política.

La historia de México no es la excepción, en la actualidad podemos encontrar algunos libros que se contraponen casi por completo a los libros de texto que leímos en la primaria, con el tiempo hemos podido darnos cuenta que todo lo que aprendimos acerca de la independencia o la revolución fue bastante modificado, fueron muchos grupos invisibilizados por los historiadores, entre ellos las personas indígenas que se levantaron en armas, las personas afrodescendientes y sobre todo un grupo muy importante al que pocas veces vemos representada su participación en la conquista de la autonomía de nuestro país, las mujeres.

El excluir a las mujeres de la historia de México y del imaginario colectivo como personas que han aportado a la construcción de la nación a la que pertenecemos tiene un impacto directo en la concepción del género femenino, una de las críticas más comunes al feminismo que me encuentro (y si les soy sincera,  también de las que hallo más sin sentido), es que las mujeres reclamamos los mismos derechos pero no lo hacemos cuando se trata de cumplir con el servicio militar, como si nunca en la vida las mujeres hubiéramos tenido que luchar por el país o como si las guerras no vinieran hasta nuestros hogares, como si los crímenes de los que hemos sido víctimas en cada conflicto bélico que se presenta no significaran nada, las mujeres siempre hemos sido parte de las revoluciones, solo que rara vez se habla de ello.

Las mujeres durante la independencia fueron pieza clave para el triunfo, algunos nombres destacados son los de Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario, Gertrudis Bocanegra, Altagracia Mercado, Luisa Martínez, Mariana Rodríguez del Toro, María Josefa Marmolejo y María Josefa Martínez, sin embargo, son muchísimas más las que ofrendaron su vida, son heroínas anónimas que los libros de historia borraron de sus páginas, reconocer a las mujeres en todos los ámbitos de la vida pública es indispensable para que logremos ver como  hemos estado ahí todo el tiempo y sobre todo es importante porque esto nos enseña que también podemos desarrollarnos para dedicarnos a lo que queramos, no solo a la crianza ni a las labores de cuidado, por eso en el mes de la patria recordemos a aquellas que nos dieron libertad, Que vivan las mujeres que nos dieron patria, que vida la independencia, que viva la igualdad, ¡Que viva México!