La trata de personas es un delito que consiste en el comercio de seres humanos, puede ser con fines de esclavitud laboral, experimentación bioquímica, mendicidad, tráfico de órganos, prostitución o cualquier otro tipo de trabajo forzado.

Se estima que el 95% de las víctimas de trata con fines de explotación sexual son mujeres y niñas, a pesar de que contamos con una ley para prevenir, sancionar y erradicar los delitos en materia de trata de personas los esfuerzos por parte del Estado parecen ser insuficientes, tanto así que actualmente se analiza la posibilidad de decretar una tercera alerta de violencia de género contra las mujeres en Veracruz por desaparición forzada, dichas desapariciones están asociadas a la trata.

No hay una cifra oficial de personas desaparecidas en México, en muchos casos no se hace la denuncia pertinente por miedo a represalias, aun así, tan solo en 2019 se registraron 5,184 nuevos casos de desaparición forzada, algunas de las víctimas de trata que han logrado escapar de sus captores relatan cómo fueron raptadas con violencia o con engaños para luego obligarlas a prostituirse, en muchos casos llevaban años desaparecidas sin que sus familias supieran de ellas, no sabemos si alguna de las mujeres reportadas como desaparecidas está ahora en algún otro país prostituyéndose a la fuerza, sin red de apoyo alguna para salir de esta situación.

Se estima que la trata de personas es el tercer delito más lucrativo a nivel mundial (solo superado por el tráfico de drogas y de armas), hay países en donde han adoptado un sistema en el que se castiga a quienes paguen por mantener relaciones sexuales, se le conoce como “abolicionista” y busca acabar con la prostitución, ya que se le considera una forma de violencia de género, se enfoca en responsabilizar a los clientes, dentro de los resultados que han obtenido ha sido disminuir drásticamente la trata, así como el turismo sexual, se ha logrado entender la relación directa que existe entre el aumento de trata, prostitución y el deslindar de responsabilidades a los usuarios, estos países han atacado de raíz el problema que es a todas luces evidente, que sin clientes no hay trata.

En nuestro Estado la prostitución es regida por una ley que no ha tenido modificación alguna desde 1943, no ofrece soluciones realistas y mucho menos acordes a la situación actual, a pesar de ello, de que existe información suficiente para asociar el creciente número de desaparecidas con las redes de trata que operan en Veracruz, de que tenemos el precedente de cómo en otros países han prácticamente erradicado la trata aboliendo la prostitución, a pesar de saber la problemática que atravesamos parece no hay intención de realizar los cambios pertinentes en las políticas públicas para acabar con la trata, mucho de ello tiene que ver, precisamente, con lo lucrativo de dicha actividad, para terminar con la trata de mujeres lo primero es señalarla y visibilizarla, las víctimas están ahí, a la vista de todos y todas, solo falta que queramos voltear a verlas.​