​Por: Felipe de Jesús Fernández Basilio

Por desgracia nuevamente nos llegan noticias graves de Venezuela y es que en ese país la situación empeora cada día más y es que el régimen dictatorial, ya no hay otra manera de llamarlo, cada vez es más burdo en sus maniobras para seguir con el gobierno del país y aniquilar a cualquiera que se oponga al dictador bananero, pero no por ello menos sangriento que otros dictadores que han existido en otras latitudes.

Y efectivamente se trata de un dictador sanguinario ya que en lo que lleva en el poder se ha cobrado la vida de muchos miles de opositores a su gobierno, como ejemplo recordemos a todos los que han muerto en las represiones que ha hecho a lo largo de toda la República de Venezuela, ya que tanto manifestaciones en su contra como brutales represiones ha habido en todas y cada una de las ciudades de ese país y no solo unas cuantas en la capital como han querido aparentar el gobierno dictatorial y sus simpatizantes en Latinoamérica.

Siendo la última entrega de la novela sangrienta dirigida por Nicolás Maduro el “atentado” que sufrió la semana pasada cuando estaba encabezando un desfile militar, ¡Cómo les gustan a los dictadores las paradas castrenses!, durante el cual supuestamente dos drones aparentemente cargados con explosivos se acercaron al templete en el que el dictador y su plana mayor se encontraban con la supuesta intención de acabar con la vida de ellos.

Mas tan solo con ver las imágenes de los hechos nos damos cuenta de que todo se trató de un montaje, ya que ni el dictador ni sus secuaces se vieron en situación de pánico, sino que por el contrario reaccionaron con una pasmosa calma a la situación que supuestamente los puso en “tan gran peligro” y además sin pasar por alto la facilidad con la que los francotiradores hicieron explotar a uno de ellos mientras que el otro simplemente se estrelló en un edificio, así como la errática explicación que la tiranía venezolana ha dado respecto del asunto.

Sin embargo lo que sí fue cierto fue la brutal represión que se ejerció en contra de los políticos opositores al régimen de Nicolás Maduro, ya que inmediatamente se ordenó la detención de dos diputados venezolanos: Juan Requesens y Julio Borges, concretándose la del primero junto con su hermana mientras que la del segundo no se pudo realizar debido a que se encuentra en Colombia y ello sirvió de pretexto para que Maduro dijera que dicho país tenía que ver con la organización del fallido atentado y así intentar fomentar su teoría de la conspiración.

En cuanto a los diputados acusados llama la atención que el diputado opositor que fue detenido lo fue inmediatamente que fue señalado por el gobierno sin esperar si quiera que el órgano pelele (la Asamblea Constituyente) creado por Maduro formalizara su desafuero y que después se filtrara desde el lugar de su detención un video en el cual se le ve en pésimas condiciones, algunos dicen que drogado, declarando lo que sus captores querían que declara, es decir incriminándose en una conspiración para asesinar al tirano, mas ese video tiene poca credibilidad, porque sugiere que Requesens fue coaccionado para declarar.

Aunado a lo anterior y a decir de expertos en la situación de Venezuela se espera también otra depuración de las fuerzas armadas de ese país, ya que se percibe que Maduro no las controla en su totalidad ya que a diferencia de Chávez él no pertenece al ejército y a pesar de que ha coptado a los altos mandos militares otorgándoles grandes concesiones en los sectores minero, petrolero y de importación de alimentos; mas no lo ha logrado con los mandos medios y con la tropa, ya que ellos al igual que cualquier otro venezolano tienen que preocuparse por conseguir literalmente sus tres comidas al día.

Y es que esa es precisamente la cuestión que más preocupa al tirano, la gran pobreza y escasez de insumos básicos que azota al país debido a la desastrosa política económica llevada a cabo primero por Hugo Chávez y ahora por Maduro, la cual ha hecho que la popularidad del régimen haya descendido y que solo se mantiene debido al férreo control de las instituciones que mantiene con mano dura y con la creación de mitos de conspiraciones orquestados por la “ultraderecha” y por países extranjeros “enemigos de la revolución” como los estados Unidos o Colombia, mas parece que esta vez no le ha funcionado tanto la estrategia al tirano, ya que no se han visto las grandes concentraciones de chavistas que antes lo acompañaban.

Con el tiempo veremos si se mantiene el cuento de la “Revolución Bolivariana” pero lo que ya se sabe es que cada día muchos venezolanos abandonan su país para escapar de la pobreza y la tiranía que imperan en su patria y que el régimen se está quedando sólo debido al descaro con el que ha terminado con la democracia; mas por lo mismo cada vez va a ser más brutal ya que como toda fiera acorralada en su desesperación para sobrevivir, sus coletazos serán cada vez más agresivos y el riesgo de que haya un gran baño de sangre en ese país con el tiempo va a ir en aumento y muestra de ello es la simulación del atentado para en base a la misma desatar una ola de represión en contra de los opositores al déspota venezolano.

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