​El “blue monday”, conocido también como el lunes triste, es el tercer lunes de enero, el cual tiene como premisa el ser el día más triste del año. Se utilizo por primera vez el 24 de enero de 2005, como parte de un comunicado de prensa publicitario de Sky Travel. Para este 2024 será el lunes 15. La razón de su efecto se debe a diversos factores como las deudas, la falta de motivación, los propósitos fallidos, los excesos navideños, el clima y las frustradas resoluciones de año nuevo, siendo algunos de los factores que desencadenan en tener un estado de ánimo decaído, llevándonos a lo que englobamos como la cuesta de enero.

La “cuesta de enero” son las reacciones que se presentan en dicho mes, debido a las decisiones tomadas normalmente en diciembre, es decir; en enero vemos reducido nuestro presupuesto, debido a varias y grandes compras hechas en diciembre, ya sea por créditos o por contado que afecta nuestra disponibilidad futura. Aunado a esto no se toman en consideración los efectos económicos estacionales como la inflación y las variaciones en las tasas de interés, con lo cual, el inicio de año tiende a ser complicado para una gran parte de la población ya que de forma natural la actividad económica se contrae.

Si tomamos en consideración que en diciembre la velocidad del dinero esta por encima de la media, en enero esta por debajo de la media. ¿Qué quiere decir esto? Básicamente que en diciembre el dinero cambia de manos más rápido que en el resto del año, en contraparte, en enero el dinero tarda más en cambiar de manos que en el resto del año, con lo cual, la actividad económica se ve desacelerada, si bien el fenómeno de la cuesta esta desarrollado principalmente por poca educación financiera en el país, es de notar que con el paso del tiempo esta ha ido disminuyendo, ya que se fortalece las previsiones por parte de la población y por parte del Estado.

La actividad económica en diciembre fortaleció algunos sectores empresariales que aún tenían complicaciones por la inflación y por la propia pandemia pasada, ahora, si bien tuvieron un alza estacionaria en diciembre, para enero habrá una breve contracción hasta llegar a su equilibrio general en febrero.

Para este inicio de año habrá un aumento de 17% en comparativa con la derrama económica del 2023, fortaleciendo sectores estratégicos como el turismo que marca un crecimiento sostenido en los últimos años, a esto, se suma que las condiciones en las variables macroeconómicas en el país son estables, ya que la inflación esta casi equilibrada al igual que la tasa de desempleo, dando la posibilidad de tener mas opciones de compra con un nivel de precio más equilibrado.

La cuesta de enero siempre se había manejado como un problema de la sociedad mexicana, sin embargo, afortunadamente es algo que ha ido cambiando tanto por la participación de la sociedad en la distribución de sus gastos, como por las acciones gubernamentales en la distribución de los recursos, siendo algunas medidas el pagar los programas sociales en enero, así como la división de prestaciones a una parte en diciembre y otra en enero.