El año 2025 se vislumbra como un periodo crucial para México, marcado por la transición gubernamental tras las elecciones de 2024 en México y Estados Unidos, así como por los retos económicos internos y externos. Para analizar el desarrollo económico del país, podemos enfocarnos en cinco variables clave, tanto reales como nominales.
1. Producto Interno Bruto (PIB) Las proyecciones para 2025 indican un crecimiento económico moderado. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) estima un incremento del PIB entre un 2% y un 3%, mientras que organismos internacionales, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), prevén un crecimiento más conservador, en torno al 1.2%. Esta desaceleración respecto a años anteriores se debe a factores como la incertidumbre política, la posible implementación de políticas proteccionistas en Estados Unidos y una menor inversión pública.
2. Inflación Se espera que la inflación se mantenga cercana al objetivo del Banco de México, con una tasa proyectada del 3.5% para 2025. Este nivel refleja estabilidad en los precios, aunque persisten riesgos vinculados a la volatilidad del tipo de cambio y posibles tensiones comerciales internacionales.
3. Mercado Laboral El mercado laboral enfrenta desafíos importantes. Aunque la tasa de desempleo se mantuvo baja en 2024, rondando el 2.5%, se prevé que la desaceleración económica y la incertidumbre política puedan afectar la creación de empleos y la calidad de los mismos en 2025.
4. Política Económica En el ámbito fiscal, el gobierno ha manifestado su compromiso con la consolidación fiscal, proyectando una reducción del déficit del 5.9% del PIB en 2024 al 3.9% en 2025. Esto implicará recortes en el gasto público, particularmente en infraestructura, lo que podría impactar negativamente el crecimiento económico. Por el lado monetario, se espera que el Banco de México mantenga una postura prudente, vigilando de cerca la inflación y el tipo de cambio, con una Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio (TIIE) estimada entre 8.5% y 9%.
5. Tipo de Cambio El peso mexicano ha mostrado volatilidad en meses recientes debido a factores externos como las políticas monetarias internacionales y las tensiones comerciales. Para 2025, la SHCP prevé un tipo de cambio promedio de 18.7 pesos por dólar, aunque la incertidumbre política y económica podría ejercer presiones adicionales sobre la moneda.
A pesar de los grandes retos, como la llegada a su segundo mandato de Donald Trump en Estados Unidos, 2025 también presenta importantes oportunidades, especialmente en el ámbito del nearshoring. Este fenómeno podría representar más de 50 mil millones de dólares para el país, equivalente a más del 1% del PIB. El éxito en alcanzar estas cifras dependerá de la implementación de políticas fiscales y monetarias prudentes, así como de la capacidad de México para adaptarse a un entorno internacional incierto.
¡Que este 2025 sea un año lleno de logros y bendiciones!