Pedro Kumamoto ganó fama en 2015 cuando se convirtió en el primer candidato independiente que obtuvo una curul en el Congreso de Jalisco. Este joven había sorprendido a la población, a los medios de comunicación y a la élite política de larga tradición, puesto que su campaña estuvo llena de singularidades.
Kumamoto recorrió las calles para mostrar que la ciudadanía podía formar parte activa de la vida pública y de la política mexicana, en especial, en el estado de Jalisco. Se caracterizó por mostrar una campaña austera y llena de movilización en territorio, pero, de igual forma, con gran fuerza en las redes sociales.
En aquel entonces, se comenzaba a pensar que las candidaturas independientes serían una vía para escapar de la corrupción de los partidos políticos y, específicamente, de lo que se ha llamado la partitocracia. Se creía que era una alternativa para quitarle tanto poder a los partidos, no obstante, a primera vista, no se vislumbraba el camino sinuoso que esto implicaba.
Hoy en día, las democracias no pueden subsistir sin los partidos políticos, esto lo han identificado diversos especialistas no solo en México, sino en todo el mundo. Aunque las candidaturas independientes eran un camino, la realidad es que esta opción presenta múltiples inequidades que dan como resultado una gran desventaja para quien se atreva a tomarla.
No contar con el respaldo de un instituto, no solo al momento de la elección, sino también al entrar en funciones, resulta pesar mucho. Así, lo vio Kumamoto, en cuanto quiso trabajar en comisiones y al ver congelada lo que se llamó “la ley Kumamoto”; de igual forma, tuvo que enfrentar obstáculos ante todas las medidas que proponía.
Pese a lo anterior, Kumamoto se ganó la admiración de gran parte de la población y generó intriga en especialistas en campañas políticas. ¿Qué había hecho bien para alcanzar ese espacio en el legislativo local?, ¿sería, a partir de ahora, una forma viable de participar en política?, ¿los partidos políticos serían desplazados?
Ya han pasado varios años y todavía tenemos partidos políticos y siguen siendo la mejor forma para contender por un escaño en las cámaras o para competir por el poder ejecutivo, ya sea local o federal. Tampoco hay que pasar por alto que tuvimos al apodado “El bronco”, Jaime Rodríguez Calderón, quien fue conocido por ser candidato independiente y gobernador de Nuevo León, empero terminó decepcionando.
Volviendo al caso de Kumamoto, hay que decir que pronto se dio cuenta de que la vía independiente no generaría, al menos no ahora y no aquí, grandes rendimientos políticos y que su incidencia se vería reducida, para efectos reales, en pequeños granitos de arena que, aunque cuentan, no son suficientes. Lo que más brindaba era esperanza.
Además de tener su movimiento conocido como Wikipolítica y de haber intentado crear el Wikipartido, al final, fundó Futuro como partido político local. En el propio sitio web oficial de este partido, se relata que, en 2018, cuando Wikipolítica no logró alcanzar ninguna victoria, se decidió iniciar la transición para convertirse en partido político, ante las dificultades de las candidaturas independientes.
Futuro ya ha ganado sus primeros espacios en los cabildos de varios municipios, así como alguna presidencia municipal y, por supuesto, una diputada plurinominal. Hay que destacar que Kumamoto resulta ser regidor de Zapopan y, claro, consejero en el partido. Asimismo, es una de las caras con mayor visibilidad de Futuro, además de Susana de la Rosa Hernández.
Quienes vivieron la ilusión de tener un candidato independiente que buscaba revolucionar la forma de hacer política y, luego, consintieron la transición a un partido político, ahora, se sienten decepcionados ante la sorpresa que Kumamoto les acaba de dar.
Lo anterior porque, hace un año, criticaba la alianza que formaban el PAN, PRI y el PRD para combatir a MORENA, pero este fin de semana ha anunciado, de forma pública, que Futuro irá en alianza con el Partido Verde, el PT y, por supuesto, con MORENA para enfrentar al gobierno naranja de Jalisco y, claro, él será el candidato a la alcaldía de Zapopan, ¡sorpresa!
¿Bastará la suma de las fuerzas de MORENA y de Kumamoto para derrocar al partido naranja en Jalisco? ¿La ruptura entre Alfaro y Dante Delgado impactará para que el movimiento guinda tome el control en tal estado? Esto es algo que veremos en el próximo proceso electoral que tenemos ya muy cerca.
Ahora bien, solo era cuestión de tiempo para que los partidos alcanzaran al proyecto independiente que encabezaba Kumamoto y, sobre todo, para que MORENA golpeara a su puerta o quizá él tocara la de MORENA.