Columna Prosa aprisa de Arturo Reyes Isidoro

El reto ahora, mantener la unidad

La aprobación ayer en el Congreso del Estado de la gubernatura de dos años fue un triunfo político del gobernador Javier Duarte de Ochoa. De eso no hay duda. Demostró que tiene el control casi absoluto del voto de los legisladores incluyendo a los de oposición, con sus contadas excepciones.

Por más que busqué y traté de escuchar opiniones favorables a dicha disposición de la nueva Reforma Político-Electoral, no las hallé en el resto del día y en diversos círculos en los que me moví por la capital del estado. Los priistas incluso ven riesgo de que ante la reprobación de influyentes sectores de la sociedad se pueda perder la gubernatura por primera vez.

Dada la premura con la que se aprobó, quedó muy claro que la idea no era analizar la iniciativa ni tomar en cuenta la opinión de los diversos actores y agrupaciones de la sociedad veracruzana, sino de imponerla y aprobarla fast track. Se logró, aunque pienso que a un alto costo porque ahora resulta una reforma impopular.

Pero ya está. Hay que esperar para ver si se logra evitar una fractura política mayor en el seno del PRI, que ya la hay, como lo refleja la reacción del senador Héctor Yunes Landa, y como escuché a mucha militancia ayer que muestra su desacuerdo. El tono de la declaración de Héctor en contra, tuviera la iniciativa el aval o no del presidente Peña Nieto, incluso me suena a que una vez que ha dado ya el primer paso para oponerse al jefe político nacional de su partido, el siguiente podría ser irse a la oposición y desde ahí competir o incluso apoyar otra opción.

Leí atento el boletín oficial del Gobierno del Estado y me pareció medido, al menos cuidaron muy bien que no se sintiera que se estaba festinando nada. En algo ayuda si lo que se quiere es la armonía, pese a todo.

Será interesante ver, de todos modos, qué se hace y cómo para mantener la unidad tricolor, que es el principal reto, para calmar y convencer a los inconformes y para evitar el rompimiento entre los principales actores políticos priistas que hasta ahora mantienen el poder. Habrá que estar atentos.

Por lo pronto, anoche el gobernador Javier Duarte de Ochoa encabezó en un salón cercano al Velódromo un brindis navideño (y seguramente para festejar el éxito de su iniciativa) con los miembros del Poder Judicial y las diputaciones locales y federales
 
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El miércoles, último día laborable del año para los trabajadores académicos de la Universidad Veracruzana (UV), se nos dijo que sobre las dos de la tarde firmáramos la nómina del pago de nuestro aguinaldo, cuando se nos depositara.

Con gran desencanto, llegada esa hora y luego las tres de la tarde cuando terminaba nuestra jornada, se nos anunció que no sería ese día, sino hasta dentro de 48 horas, cuando se nos pagaría. La molestia fue mayúscula.

Nunca antes en la historia de nuestro sindicato, el FESAPAUV, se había dado ese incumplimiento. Vi y escuché la reacción de muchos de mis compañeros. En total, en el estado, sumamos más de 7,500. A nadie se le podía quitar de la cabeza que no había dinero porque se lo habían gastado en los Juegos Centroamericanos.

Cruzando más tarde información con muchos amigos y conocidos trabajadores del Gobierno del Estado, me enteré que les había ocurrido lo mismo: no había dinero, les dijeron como única explicación.

En el caso de la UV, cuando vieron que el mundo se les vendría encima como reacción por el no pago, la casa de estudios emitió de inmediato un boletín de prensa firmado por la Secretaria de Administración y Finanzas, Clementina Guerrero García, responsabilizando al Gobierno del Estado.

Dijo que “la circunstancia trascendía” a la administración universitaria, pero que “de acuerdo con los compromisos asumidos por el Gobierno del Estado con la institución, éstos serán cubiertos en las próximas 48 horas”. Apelaron a nuestra comprensión.

No deja de ser preocupante para los trabajadores afectados, universitarios y no, la crítica situación de las finanzas estatales: no hay dinero para hacer frente a los compromisos de fin de año, y lo más grave y preocupante es que ya tocó algo es que sagrado para los trabajadores: su bolsillo.

¿Qué pasó? ¿Por qué se incumplió? ¿Es que no se previó? ¿Es que se “cayó” el sistema electrónico de transferencia de recursos?

Hay quienes han focalizado de inmediato a un directo responsable: el Tesorero Antonio Tarek Abdala Saad. Indirectamente podría serlo si no fuera porque él hizo lo que tenía que hacer: todas las gestiones y trámites necesarios, pero quién sabe por qué motivos en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) le levantaron la canasta y le dijeron que no.

La solicitud y petición fue que se diera al Gobierno del Estado un adelanto de 500 millones de pesos a cuenta de las participaciones del próximo año, 2015. La versión que se maneja en la dependencia federal es que la respuesta  negativa estuvo acompañada de un comentario: ¿por qué no viene a pedirlo tu jefe? (¿se referían a Audirac?, pregunto yo).

Ayer todo el mundo estaba pendiente de su pago. Hubo compañeros, que viven sólo de su sueldo y de su aguinaldo, que tenían planeado salir de la ciudad de inmediato, lo que no pudieron hacer por la incertidumbre de cuándo tener recursos para sus gastos. Las 48 horas se cumplen este viernes. Ayer una fuente me dijo que en realidad no había fecha precisa para cuándo soltarán el dinero en la ciudad de México. Al anochecer, un amigo que trabaja en el Tribunal Superior de Justicia me confirmó que les notificaron que el aguinaldo de la compensación, que prácticamente es todo, se los pagarán hasta enero. Indicativo de que no hay dinero.

¿Es que acaso la inestabilidad monetaria que se vive en el país impidió el adelanto de recursos?

Si bien ayer se medio recuperaba, la Bolsa Mexicana de Valores ha venido padeciendo una racha de pérdidas, el dólar ha repuntado en detrimento del peso mexicano y los precios del crudo han seguido en picada hasta niveles históricos. ¿Ese fue el motivo?

Me preocupa otra versión que se me dio en corto al día siguiente del anuncio de que se iba a enviar al Congreso la iniciativa de Reforma Político-Electoral que incluía la gubernatura de dos años: que el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, quien también juega en la tabla del ajedrez político del país, no estaba de acuerdo, que ya había dado su opinión ante quien la tenía que dar, pero que si la minigubernatura prosperaba, entonces él iba a apretar con respecto a los recursos para el estado así como con más auditorías y acciones de fiscalización de los recursos federales destinados al estado.

¿Es que el atorón en la SHCP tiene alguna relación con aquello que dijo el senador José Francisco Yunes Zorrilla el jueves 11 de diciembre en su conferencia como reacción al gran anuncio de la chiquigubernatura, de que “de todo corazón deseo que los cálculos no les fallen” y “que las cuentas las tengan claras”?

No cabe duda que estamos ante una disputa por el poder en el seno del PRI veracruzano, que anticipa lo que ocurrirá en el segundo semestre de 2015 y en el primero de 2016. Como espectáculo no está del todo mal. Lo preocupante es que la población, la clase trabajadora sufre y paga las consecuencias sin tener por qué.

Erik Porres
Casi tomo mis vacaciones y los dejo descansar, pero no quiero dejar de mencionar un detalle sobre uno de los más callados y eficientes colaboradores del gobernador Javier Duarte de Ochoa: Erik Juan Antonio Porres Blesa, titular de la Secretaría de Desarrollo Económico.

Es poco mediático, pero es un hombre bien preparado. Cordobés, platicar con él es una sorpresa. Es un hombre de mundo y sabe bastante de manejo de medios. En lo personal compartimos el gusto por las antigüedades y por el baile de salsa (tuvimos la misma maestra: Perla Hernández).

Durante la pasada Cumbre Iberoamericana, en un famoso restaurante de Boca del Río Erik  tuvo un inusual convivio ni más ni menos que con el jefe del gabinete de la Presidencia del Gobierno español, Jorge Moragas.

Pocos saben que el cordobés tiene descendencia española por parte de su madre (agradezco el delicioso turrón que hace y que han hecho el favor de compartirme) y que en sus viajes a la península ibérica desde hace años conoció y trabó amistad con Moragas, también diputado de las Cortes Generales de España.

Del Real Madrid Erik, del Barcelona Moragas, han trabajado apoyando los procesos democráticos de América Latina. Su encuentro en Boca del Río indudablemente que puede dejar dividendos para el gobernador Javier Duarte de Ochoa dado que Moragas es la mano derecha y amigo personal del presidente Mariano Rajoy. Las relaciones son las relaciones.