La noticia, ayer, fue el encuentro entre el presidente Enrique Peña Nieto y el gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares.
La cita se dio a 27 días de que el panista asuma el poder en Veracruz y luego de que hubo muchas voces que vaticinaban que nunca se daría y que Yunes no tomaría posesión.
(En otra columna comentaré, con base en lo que ahora se sabe, cómo el Presidente engañó a Duarte haciéndolo creer que actuarían contra su odiado rival pero que para que eso sucediera era necesario que se separara del cargo, porque se oponía. Duarte lo comentó con sus más cercanos y de ahí surgieron las versiones periodísticas que decían que Miguel se caía, que no llegaría, que no tomaría posesión.)
Sobre lo de ayer, ya antes el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, había declarado en Coatzacoalcos que Miguel Ángel asumiría el Gobierno, y a continuación vino la confirmación por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Todo lo que faltaba era, pues, sólo cuestión de forma, sin embargo no por ellos menos importante por la investidura de ambos, pero, además, por ser de partidos opuestos.
Ahora sí se puede afirmar que terminó la contienda electoral, que se prolongó luego del 5 de junio por los intentos, que resultaron infructuosos, del entonces gobernador Javier Duarte de Ochoa por evitar que Yunes lo sucediera.
Perdieron Fidel Herrera Beltrán y Duarte, hoy uno en el exilio en Barcelona y el otro a punto de ir a prisión.
La reunión en Los Pinos es alentadora para los veracruzanos. Convinieron, dijo el gobernador electo, que habrá plena coordinación y colaboración entre sus gobiernos para beneficio de los veracruzanos.
“Encontré muy buena disposición del Presidente y seguramente vamos a trabajar muy coordinados a partir del 1 de diciembre”, agregó.
Lo más importante en estos momentos es que pactaron la realización de mesas de trabajo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y la de Gobernación con la finalidad de encontrar soluciones a la crisis política y financiera por la que atraviesa la entidad.
"Le pedí que Veracruz tenga de parte del Gobierno federal, de su Gobierno, una consideración especial en razón a la situación que vive el estado, una situación muy compleja, un estado que ha venido cayendo en todos los indicadores, en indicadores sociales, en indicadores de delincuencia, en indicadores de empleo", declaró al salir de la reunión.
"Lo que encontré fue un Presidente de la República totalmente dispuesto a participar en una etapa nueva en la vida de Veracruz, una etapa en la que tenemos que reconstruir el tejido social, tenemos que reconstruir condiciones para la inversión, para generar empleo, para mejorar la seguridad".
Más allá de lo institucional, seguramente Yunes Linares sabrá sacar provecho. Es un político que sabe de formas pero también de negociación, a partir de que conoce muy bien las reglas y los límites del poder.
Antes de que llegue el domingo 5, cuando habrá renuevo de Legislatura con una bancada panista fuerte, y el jueves 1 de diciembre, con el nuevo gobernador panista, el PRI pasó ayer a ser oposición.
Miguel Ángel llega al poder porque supo capitalizar muy bien el descontento popular en contra del gobierno priista de Duarte. La base de su triunfo estuvo legitimada, pues, por una amplia base social.
Las medidas que anunciará el día que rinda protesta y que marcarán los dos años de su gobierno impactarán positivamente entre los veracruzanos. Acabará de tajo con viejas prácticas y vicios que llevaron a Veracruz al abismo en que se encuentra.
Mariely, a la historia
Y María Elisa Manterola Sáinz, “Mariely” Manterola, pasará a la historia política de Veracruz porque será quien presida la sesión del cambio de poderes como presidenta de la mesa directiva de la LXIV Legislatura.
Será histórica la sesión porque será la primera vez en más de 80 años que haya alternancia. Se irá un régimen priista y llegará un panista. La casi eterna oposición dejará de serlo por primera vez.
Panista de nuevo cuño, de 53 años de edad, madre de familia, citricultora, empresaria, admiradora de Mahatma Gandhi, representará al VII distrito con cabecera en Martínez de la Torre en el Congreso local.
El pasado 5 de junio ganó por poco más de 27 mil votos de paisanos suyos del distrito que comprende los municipios de Tecolutla, Gutiérrez Zamora, San Rafael, Tlapacoyan y Martínez de la Torre.
Integrante de la conocida familia Manterola Sáinz dedicada a las empresas radiofónicas, Mariely no es ninguna improvisada en la política. La recuerdo en giras de trabajo o en tareas en Palacio de Gobierno, donde fuimos compañeros.
Por eso se que es una mujer de trabajo, seria, discreta y responsable en las tareas que emprende, y será una digna sustituta de Octavia Ortega Arteaga, ésta priista, quien concluye mañana su labor como presidenta de la LVIII Legislatura.
Tava y Sergio, civilidad política, madurez
Pero si en la Ciudad de México hubo un encuentro alentador, esperanzador para los veracruzanos, ayer en Xalapa tuvo lugar otro, que habla de la civilidad y de la madurez política de los protagonistas.
Durante un desayuno, la presidenta de la Cámara de Diputados hasta el día de mañana, Octavia Ortega Arteaga, de filiación priista, sostuvo una plática informativa, cordial, si se quiere hasta amistosa, con el nuevo presidente de la Junta de Coordinación Política de la LXIV Legislatura a partir del próximo domingo, el panista Sergio Hernández Hernández.
Lo deseable sería que en Veracruz se transitara a un nuevo estadio político, en lo que la pertenencia a partidos diferentes no conllevara necesariamente a la enemistad, si finalmente, como en el caso del que me ocupo, priista y panista son veracruzanos y buscan lo mejor para el Estado aunque con métodos diferentes.
Diálogo, negociación, entendimiento y acuerdo son instrumentos invaluables para todo aquel que se precie de ser político profesional. Alentador también que haya políticos como Octavia y como Sergio.
“El señor ya no está”
Los detalles van surgiendo. Lo han comentado los últimos escoltas que tuvo Javier Duarte de Ochoa antes de desaparecer.
Como todos los días lo hacían, llegaron a la casa de Javidú, cerca del Campo de Golf de Xalapa. Ahí permanecían en espera de alguna instrucción o movimiento, cuando de pronto salió “la señora” (Karime Macías).
“¿Saben qué? El señor ya no está ni va a venir. Nosotros estaremos aquí y no vamos a salir, así que ya pueden irse, ya no los vamos a necesitar”.
Sospechando que “algo grave” había pasado por toda la información pública que ya se manejaba sobre Duarte, temerosos, de inmediato fueron a dar parte a sus superiores y para salvar cualquier responsabilidad.
Entre ellos corre otra versión: que vecinos de Duarte, diputados federales que tienen sus casas casi contiguas, pudieron haberlo ayudado a escapar. Que Javier pudo haber brincado de la suya a la de los otros y de ahí alguno lo sacó.
Que además, algo que me resisto a creer, esos diputados cada uno tiene su propio helicóptero, según las pláticas que ellos escuchaban. Que esa pudo ser otra vía.