Cuando se hace lo que se puede se hace lo que se debe. Esta frase solía repetirla Ángel Leodegario “Yayo” Gutiérrez Castellanos, político y periodista, notario y alguna vez magistrado, para quienes no lo conocieron.

Yayo sabía que a veces en la administración pública o en tareas políticas había limitaciones económicas y que entonces había que tratar de enfrentar y si era posible superar retos, metas, hasta donde las condiciones lo permitieran pero, eso sí, nunca quedarse con los brazos cruzados y con inacción.

El 13 de marzo pasado comenté en “Prosa aprisa”: “Es posible que sea un simple rumor, pero corre ya el run run de que Clementina Guerrero tendría deseos de renunciar a la Secretaría de Finanzas y regresar a su base en la Universidad Veracruzana. Debe ser tremendo el desgaste personal que está sufriendo”. 

Y el 1 de abril pregunté en otra columna: ¿Le está funcionando al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares el equipo humano que nombró y del que se rodeó para gobernar Veracruz?

Luego de ocuparme de los secretarios de Gobierno y de Seguridad Pública, Rogelio Franco Castán y Jaime Téllez Marié, volví de nuevo a Clementina, secretaria de Finanzas entonces. Me ocupé de esas dependencias porque, dije, eran claves para el buen funcionamiento de la administración. 

“Creo que ha resultado mejor la Secretaria de Finanzas, Clementina Guerrero, quien lo ayudó a salir bien (al gobernador) de la bronca de la reestructuración de la deuda y lo ayuda a contener los efectos de la grave crisis económica, y ahora con un grupo de expertos habrá de conducir la negociación con los bancos, que no es cualquier cosa, y está obligada a entregar buenos, los mejores resultados, porque de eso dependerá lo poco o mucho que pueda lograr y realizar la administración a la que sirve”.

El sábado el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares ya no le dio tiempo de concluir esa tarea al relevarla del cargo. Hay muchas especulaciones sobre el por qué, lo que sólo lo sabe el titular del Ejecutivo.

Fue a raiz del último comentario que había hecho de ella que me llamó para agradecerme las palabras, me dijo que le estaba echando muchas ganas a su trabajo en su propósito de ayudar al gobernador y a Veracruz, y de paso, sin hacer alusión a lo que había publicado el 13 de marzo, me deslizó así como no queriendo la cosa: “Pero no me voy”.

Aunque, finalmente, se ha ido.

Para mí que simple y sencillamente cumplió su ciclo, el que le había marcado y maneja el gobernador, quien tanto política como legalmente decide cuándo empieza y cuándo termina la fase activa de sus colaboradores.

Aunque se parecen mucho, no sé si al ganar la gubernatura Yunes Linares decidió que, como lo hizo Fidel Herrera Beltrán, tendría tres gabinetes en su gobierno. Fidel lo declaró tan pronto tomó el poder: el de transición, de llegada, uno intermedio para consolidar la gestión pública y otro de salida para cubrir la retirada y la espalda.

La Secretaría de Finanzas está convertida en un tragadero de hombres (y ahora de una mujer) desde el sexenio pasado, ayer por el manejo a que obligaba el gobernador Javier Duarte, quien quería que los titulares tuvieran encendida la “licuadora”, a lo que muchos se resistieron lo que los obligó a irse,  hoy, ¿por la misma causa?

Creo que Clementina hizo lo que pudo y, por lo tanto, lo que debía. Recibió no una papa caliente sino una granada ya sin espoleta a punto de estallar en cualquier momento.

Nunca un Secretario de Finanzas, y menos una mujer (ella hizo historia al ser la primera en ocupar el cargo) había recibido las arcas en cero y además con una deuda histórica, asfixiante. Haber aceptado el nombramiento fue un verdadero reto y un acto de valentía.

Decidió echarse el trompo a la uña, bailar con la más fea y sacrificar su comodidad (la tenía, comparada con la situación de la dependencia de gobierno a la que llegó) en la Universidad Veracruzana para emprender quizá la tarea más difícil y complicada que ha tenido en su vida. Lo hizo con éxito si se toma en cuenta que no se puede sacar oro de las piedras, aunque creo que lo intentó.

El único error que creo que cometió fue haber aceptado que la degradaran pasando a ser coordinadora de asesores en lugar de darle las gracias al gobernador. Miguel Ángel Yunes Linares es su propio coordinador de asesores y todo su cuerpo de asesores. Nadie le va a decir qué hacer. Él hace lo que quiere sin consultarle a nadie tal vez con excepción de sus hijos.

No se debe perder de vista que, por otro lado, Clementina no es panista, nunca fue del equipo político de Miguel Ángel, menos de su círculo cercano y la suya era más bien una posición para la rectora de la UV, Sara Ladrón de Guevara, para la universidad si se quiere, e incluso para la comunidad universitaria si se desea llegar a un extremo, por el papel que jugó la casa de estudios tanto en la movilización contra Javier Duarte, lo que ayudó indirectamente a la causa azul, como en la integración del Plan Veracruzano de Desarrollo, que a lo último no resultó más que una fachada porque todo ha quedado en buenas intenciones.

Por lo que ha sucedido, Yunes Linares consideró que el sábado se vencía el compromiso, se agotaba el crédito y que ya había cumplido con la UV, o con la rectora.

Pero, a juicio mío, el fondo es otro: el cambio fue el primer paso que dio el gobernador para empezar a tomar posición de todas las áreas claves del gobierno con miras al proceso suscesorio de 2018, para apuntalarse con sus cercanos y de toda su confianza, y la más clave de todas es la de Finanzas. Clementina era insostenible.

De Guillermo Moreno Chazzarini me han dado las mejores referencias, como me han hecho ver su cercanía con el grupo (o la familia) Yunes Linares-Márquez. Actualmente es síndico con licencia del municipio de Boca del Río aunque también fue funcionario del Orfis durante parte del gobierno del licenciado Miguel Alemán y al inicio del gobierno de Fidel Herrera.

Con él, el gobernador ha iniciado la tarea política futurista por donde debía comenzar: por el del manejo del dinero, de los fondos, de los recursos, del aceite para mover toda la maquinaria sin que se atore en ningún momento.

Yunes mueve ya sus piezas. Ha limado asperezas con su partido, dejando que la dirigencia estatal del PAN se reelija sin entrometerse, lo que ha gustado a los interesados quienes a cambio han decidido apoyarlo en su proyecto mayor: el de que su hijo Miguel Ángel lo releve.

Está previsto que Rogelio Franco Castán se vaya también de la Secretaría de Gobierno, otra de las secretarías clave. Se irá como candidato a un cargo de elección popular el próximo año si es que continúa la alianza, o se irá del gobierno si el PRD termina su amasiato con los azules. El gobernador abrá cumplido también con el PRD, con el pago de cuotas, de compromisos.

Nada, pues, de qué sorprenderse con los movimientos que ya han comenzado. 

Duarte empieza a dejar de ser noticia

Pues llegó Duarte a México y por más que los medios quisieron estirar la nota haciendo una cobertura algunos incluso minuto a minuto, mi percepción es que el gordo empieza ya a dejar de ser noticia.

Creo que levantará y atraerá la atención de nuevo sólo si decide involucrar y denunciar a excolaboradores o implicar a políticos del altiplano, o a alguien de Morena o hacer algún reproche a algún medio o a algún destacado periodista.

Duarte dejará ya de vender como noticia. Ahora sólo a esperar detalles del proceso que se le sigue pero sin esperar algo relevante a menos que lo exoneren o decida decir algo que cimbre a México.

Apoyo a actividades culturales en Xalapa

Ahora que inició el verano y que Xalapa se prepara para recibir la Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil en el Colegio Preparatorio a partir del próximo viernes, el Cuarto Festival de Tunas que organiza activamente la filósofa Karla Rocher Montano, el Verano de Títeres que se llevará a cabo del 22 de julio al 27 de agosto en el Rincón de los Títeres bajo la dirección de Lorenzo Portillo Armendáriz y David Aarón Estrada, del grupo Merequetengue Artes Vivas, o el Festival de las Flores que será en agosto, debe destacarse el gran trabajo y las inversiones que para promover la cultura ha realizado el alcalde Américo Zúñiga Martínez. Ya comentaremos sus obras.