Quiero pensar que todo lo habría precipitado la filtración que un funcionario del gobierno del estado hizo de la pretensión –o de la decisión que tal vez ya se había tomado– de reemplacar los vehículos que circulan en el estado, lo que ha provocado diversas reacciones –la mayoría de ellas críticas– contra la nueva por la carga económica que representaría para todos los propietarios de unidades. La filtración, que dio pie a la información noticiosa, provocó que fuera el propio gobernador Javier Duarte quien saliera a dar una explicación al respecto diciendo que se “analizará” la medida “ya que por ahora la propuesta de integrarles un chip a las placas tiene que ver con una normatividad aplicable más que con un tema económico con uno de seguridad, en lo que se refiere a la propiedad de los vehículos. Indicó que esta medida forma parte de los acuerdos establecidos en el Programa Nacional de Seguridad Publica, ya que tiene que ver con la identificación de los propietarios, a través de chips... Por lo que sin ser un anuncio oficial se analizarán los detalles, así como los mecanismos a utilizarse y cuando se tenga la información ya analizada, procesada y lista, con mucho gusto haremos el comunicado oficial”. Luego –según tengo entendido– de una severa reprimenda a quien filtró la información (en esta espacio publiqué que según tuve conocimiento, al ejecutivo no gustó que el secretario de Comunicaciones saliera a hacer declaraciones a las pocas horas de haber asumido la nueva responsabilidad), el pasado fin de semana en un hotel de la capital del estado la titular de Comunicación Social Gina Domínguez Colío reunió a todas las y los llamados enlaces de prensa de las dependencias para comunicarles de la manera más precisa cuáles son los lineamientos a los que se deberán sujetar en materia informativa los titulares de las secretarías y funcionarios públicos. Según versiones que pude conocer, se habría manejado el concepto de unificar criterios para dar orden a la información oficial y se habrían acordado las siguientes medidas, entre otras: Cuando haya un evento a donde acuda el gobernador y secretarios, la información, el boletín, será con el mensaje del ejecutivo. Los secretarios no aparecerán, sólo en caso de ser necesario o que verdaderamente se justifique. Cuando, por ejemplo, haya un evento agrario o del sector económico, etc., se manejará información del secretario responsable sólo si es necesario complementar lo que ya dijo el gobernador, si no, no aparece. Si acuden dos, tres o cuatro secretarios a un mismo acto, ellos con sus respectivos enlaces de prensa deberán ponerse de acuerdo para emitir un solo comunicado que incluya las líneas de todos. No se considerará como oficial ni reflejará el criterio oficial la llamada entrevista banquetera, la que los reporteros realizan en la calle, en el café, donde encuentran a un funcionario ocasionalmente. Las preguntas de entrevistas radiofónicas o para televisión que soliciten a los secretarios y demás funcionarios, deberán ser primero consensuadas con la oficina titular de comunicación social a fin de validar los datos que se transmitan a la audiencia y ser muy precisos al respecto, para no provocar desinformación. Se les indicó a los responsables de prensa de las dependencias que digan a los secretarios que no den datos extraoficiales ni notas informativas vía telefónica. Después de cada evento oficial, los enlaces tienen máximo una hora para enviar su información (¡uy!, conozco por lo menos a uno que no es capaz de redactar un solo párrafo por lo que luego busca quien le haga el trabajo; tendrá que pagar seguramente de su bolsa a quien le haga el favor para poder cumplir con el tiempo fijado). Los materiales escritos tendrán como máximo una cuartilla y todo el material que se quiera difundir de orden gubernamental deberá ser canalizado a través de la oficina de prensa de la Dirección General de Comunicación Social, no hay otro canal. Los enlaces no están autorizados para dar ninguna información de sus dependencias, si no es con el aval y consentimiento de la oficina titular de comunicación social, y, además, deberán evitar hacer cualquier comentario relacionado con sus dependencias en todas las redes sociales. Deberá ignorarse toda información o comentario que se publique o difunda a partir del rumor o del “chisme”. Nadie deberá ocuparse de ello y menos intentar algún desmentido o aclaración; como rumor deberá caer por su propio peso. Como se podrá advertir, la nueva política de comunicación social marca un cambio radical con las pasadas administraciones en las que todos los gobernadores, con la excepción de Patricio Chirinos que revisaba personalmente el boletín informativo del día siguiente (se le subía en ocasiones por la mañana y lo veía sólo hasta que tenía tiempo o tal vez hasta que se acordaba, por lo que lo bajaban para su difusión a la media noche y aparecía publicado siempre a 8 columnas en el principal diario de Xalapa pero porque lo enviaban como inserción pagada, de lo que cuando se enteró casi al final de su sexenio casi le dio el patatús), obraron con más libertad respecto de sus colaboradores. Pero son estilos y sólo con el paso del tiempo se podrá calificar si el actual es acertado o no. Después de que me he enterado de todo ello, ahora me explicó porqué luego de solicitar que me recibiera un secretario de despacho para pedirle que cuando fuera necesario me corroborara información para evitar el rumor o la desinformación, no tuve respuesta. Pero aparte de que esos son lineamientos internos, que además sirven para saber en qué términos se manejará la nueva administración en materia informativa oficial, no deja de ser alentador que el gobernador Duarte de Ochoa –según se manejó oficialmente– haya reiterado “su profunda convicción de garantizar en Veracruz un clima de libertades para los medios de comunicación, ya que en la libertad está el camino para que cada veracruzano encuentre su propia realización y avance en la ruta del progreso”, según lo manifestó al asistir como invitado especial a la celebración del 80 aniversario de la estación radiofónica XEU del puerto de Veracruz el pasado fin de semana. Ahí expresó “que una sociedad abierta y libre está mejor preparada para aprovechar las oportunidades que ofrece el avance de las tecnologías de la información, e indicó que los veracruzanos son herederos de una gran tradición libertaria que fortalece sus valores democráticos a través del debate y la argumentación en los espacios públicos como la radio”, según la versión oficial.