“… en un ambiente de alguna manera reservado, Erick Porres Blesa empieza a recordar cómo el ritmo de su vida empezó a cambiar aquel día cuando se encontraba estudiando su maestría en la Universidad Iberoamericana y recibió la llamada de Javier Duarte de Ochoa –con quien ya tenía una relación desde hace muchos años– para invitarlo a incorporarse a su equipo de trabajo.” Así narra, en una excelente entrevista, José Pastor Sánchez, reportero de Política, la génesis de un nuevo servidor público en Veracruz.

 

Leamos cómo lo presenta:
“Con tan sólo 34 años, soltero y aún estudiante, el actual secretario de Desarrollo Económico y Portuario se ubica como un hombre institucional que llegó a Veracruz para hablar en el mismo tono de los empresarios, pero con el humanismo por delante.

En entrevista con Política, realizada justo el día de su cumpleaños (el pasado 11 de enero), Erick Porres Blesa deja ver ese vacío que se siente cuando la vida se dedica 100 por ciento al trabajo y de pronto en un momento libre se da uno cuenta que no está la pareja y la familia al lado para disfrutar los pocos instantes juntos.

Pero también aflora al hombre que practica la meditación para alimentar su espíritu y enfrentar los retos que se le presentan día con día, entre ellos los «golpeteos políticos», que sabe ubicar muy bien, gracias a la Maestría en Comunicación en la Universidad Iberoamericana de la Ciudad de México, que cursa a la par de ser secretario de despacho.

Admirador del ex presidente Vicente Fox Quezada y respetuoso de las enseñanzas del ex dirigente nacional del Partido Acción Nacional, Manuel Espino Barrientos, con quien trabajó como su secretario particular, se declara como un panista que sabe ser institucional y trabajar más allá de diferencias partidistas, pues argumenta que hay pensamientos universales: la solidaridad, el bien común y el humanismo.”

“–¿Le costó trabajo tomar esta decisión?” –le pregunta José Pastor sobre la invitación del nuevo gobernador.
“–Ninguno. No lo pensé ni un solo segundo. En el momento en que recibí su invitación, al principio no sabía para qué cargo. Simplemente le dije: «Gobernador a tus órdenes.

 

Vámonos a Xalapa y luego vemos». Y así fue, tiempo después me enteré que me estaba considerando como secretario de Desarrollo Económico y Portuario, y pues con más gusto.”

“–Qué bien, qué bien. Pero, ¿dejó su familia, o su familia vive aquí con usted?
–No, mi familia vive en Córdoba, la gran mayoría, aunque mis padres viven entre el DF, Córdoba y España. La viven entre las tres ciudades. Soy soltero, la novia vive en el DF, pero ya está viendo las posibilidades de venirse a vivir en Xalapa.”

“Siempre es complicada la vida del servidor público, poco comprendida. Se tiene una imagen de que se lleva una buena vida. No, yo la buena vida la tenía antes de ser servidor público (risas), yo ahorita es mucho trabajo y poca buena vida, inclusive de este mes y once días.

 

Hoy es mi cumpleaños por cierto, de este mes once días que llevamos en la oficina he tenido un solo día libre que fue este domingo. Entonces, de repente me topé que no tenía nada que hacer. La gente seguía de vacaciones, no tenía yo giras y entonces dije: ‘y ahora que se hace’. No supe qué hacer, me fui a jugar con unos amigos, a comer a Xico, pero no he tenido tiempo de conciliar la vida personal. La novia ha sido muy solidaria, lo cual agradezco porque si no, sería imposible, verdaderamente imposible.”

“–Para ser fuerte un servidor público tiene que alimentarse espiritualmente, emocionalmente y físicamente para enfrentar cualquier situación que se venga, ¿cómo se alimenta Erick en ese sentido?

–Yo suelo meditar. De hecho, todas las noches antes de dormirme pongo mantras, medito y me duermo con eso.”
Sin duda, un buen chico, un auténtico chico de la Ibero. ¡Veeezzz!

En “Prosa aprisa” del viernes publiqué: “El año pasado, una noche, una amiga y reconocida profesional con una larga trayectoria además de bastante conocida en muchos círculos profesionales de Xalapa me llamó entusiasmada por teléfono para preguntarme ante dónde y ante quién debía ir porque una amiga suya le había avisado que estaban convocando por la radio a inscribirse para participar en la selección y designación de la nueva titular del Instituto Veracruzano de la Mujer y ella consideraba que no sólo reunía todos los requisitos y tenía todos los méritos además de que se sentía muy capaz y hasta me alarmó porque me dio la impresión de que ya se sentía la nueva jefa del organismo.

 

Le pedí que respirara hondo, profundo, y con toda calma le expliqué que eso no era más que una verdadera tomadura de pelo porque de antemano ya estaba decidido, que no era más que una forma de tratar de validar un clásico dedazo y a la designación darle visos de que había sido democrática. Con mucha tristeza entendió muy bien lo que le había dicho y resignada y desilusionada colgó. Los hechos le acabaron de confirmar lo que le dije.

Esto lo he recordado ahora que asistimos a la pasarela de aspirantes a la titularidad de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. Se registraron más de una decena de aspirantes donde ha habido de todo: de chile, de dulce, de  manteca, de mole y hasta de pipián.

 

He visto que todos y todas lo toman en serio o por lo menos eso reflejan y todas y todos se dicen con méritos suficientes y algunos hasta actúan como si ya fueran los nuevos titulares. La verdad es que el show está bien montado.

 

Declaraciones ante la prensa, entrevistas en noticiarios de televisión, calificaciones y descalificaciones, porras a favor y en contra. En fin. No cabe duda que nos gusta hacernos o que nos hagan porque, júrelo, de antemano ya está decidido quién va a sustituir a la licenciada Nohemí Quirasco.  Pero así somos felices. Qué le hacemos.” Ayer se conoció el “resultado”. Qué más se puede agregar.