¿El PRI, un partido de corruptos? Por lo menos, ¿el PRI de Veracruz, un partido de corruptos? Hoy la respuesta es incontrovertible, si bien no se puede generalizar.
La semana pasada, curiosamente no fueron los enemigos acérrimos del tricolor, los panistas, los que lo confirmaron, sino jueces del Poder Judicial del estado al dictar auto de formal prisión contra ex alcaldes que desviaron recursos públicos.
Tengo curiosidad por saber cuándo iniciará la dirigencia estatal del otrora invencible el proceso de expulsión, ya que hace una semana el presidente del Revolucionario Institucional, Ranulfo Márquez Hernández, anunció que si los jueces declaraban culpables a ex alcaldes y ex funcionarios de su partido, serían expulsados. Que recuerde, desde 1984 –si no me falla la memoria– cuando el tricolor entonces presidido por Ángel Leodegario “Yayo” Gutiérrez expulsó a un militante del norte de la entidad porque le había jugado las contras en un proceso electoral, a nadie se ha echado de las filas del partido en el poder en Veracruz.
Los estatutos del PRI establecen que si uno o algunos de sus militantes se ven inmiscuidos en un proceso penal y derivado de éste se desprende una sentencia condenatoria se aplicarán las sanciones que podrían llegar hasta la expulsión, recordó el dirigente estatal. “Por ello, si en este caso en particular se desprenden sentencias de culpabilidad se iniciará el proceso de expulsión.”
¿Se les echará del Paraíso tricolor como se echó a Adán y Eva del Jardín del Edén, expulsión representada en algunos cuadros por un ángel que con el índice de la mano izquierda les señala la salida mientras que con la derecha sostiene la espada de la justicia divina? ¿Se les colgará en la plaza pública, la Plaza Lerdo, para escarmiento de los demás priistas en el poder? ¿Se les quemará con leña verde en la hoguera mediática como a los herejes? ¿Rodarán sus cabezas en la guillotina tricolor previo paseo por toda la avenida Ávila Camacho desde la sede tricolor hasta la Plaza Lerdo en medio de una multitud que los lacere sin piedad, para que aprendan? Ya veremos si Ranulfo llega a la plaza pública con martillo, clavos, escalera y sogas o con un palo mayor, leña combustible y cerillos o con algún hacha o machete y un cesto para recoger las cabezas.
Tengo curiosidad, porque tiene que reconocerse que el tricolor dio un paso verdaderamente audaz, valiente pero arriesgado, cuyos efectos los veremos el próximo año en las urnas: por un lado, al decidir sus militantes en el poder que se enjuiciara a correligionarios penalmente y de paso que se les exhibiera como a los peores criminales (independientemente de su culpabilidad se me hace en algunos casos un linchamiento mediático al exhibirlos camino a prisión con su ropa todavía de trabajo o tras las rejas aun cuando los jueces no habían sentenciado), se aceptó lo que siempre se negó: que los priistas en el poder roban, que son corruptos, que abusan del poder.
Pueden ser dos los efectos: que el electorado, el ciudadano, lo reconozca como un acto de verdadero cambio, de lavar por lo menos el rostro y decida devolver la confianza y la credibilidad en los políticos del PRI, o que les vuelva la espalda al confirmar lo que siempre sospechó, de lo que siempre tuvo certeza aunque no contaba con pruebas.
Aunque queda todavía un tercer aspecto a considerar: si el priismo busca el primer efecto, entonces tiene que ir más adelante, no pararse ya, y enjuiciar, llevar ante la justicia a ex alcaldes de municipios medianos y grandes, ya que si los dirigentes bajaran verdaderamente al pueblo escucharían la ola de sospechas porque sólo se procedió contra ex autoridades de menor cuantía, “sólo contra unos pendejos que no saben leer ni escribir” como escuché que comentaba un taxista.
Es audaz la medida luego de los descalabros electorales en Guerrero y en Baja California Sur con apenas una semana de diferencia, pues el ciudadano, el votante en potencia, se puede preguntar con toda justificación qué garantía hay de que por unos cuantos priistas llevados ante el juez el resto, los que ahora están en el poder, no son iguales o peores, tomando en cuenta además que de los 212 que acaban de entregar el poder en diciembre pasado, el Congreso local no aprobó la cuenta pública 2009 de 123 ayuntamientos, la mayoría priistas.
Si bien las órdenes de aprehensión comprenden a ex munícipes de todos los partidos, es tanto el descaro de las oposiciones que sus dirigentes son capaces de no ver la paja en el ojo propio sino sólo en el ajeno y desatar una campaña mediática con miras a las elecciones del 2012 acusando al PRI de ser un partido de corruptos, aunque es posible que cuando se echó a rodar la maquinaria del castigo oficial se haya considerado este riesgo.
Es posible. Por lo pronto ha quedado plenamente confirmado que el PRI es un partido de corruptos, aunque no todos lo sean.
¡Zas! Tiene que reconocerse que gracias al gobernador Javier Duarte se creó ya la primera escuela de aviación en Xalapa.
Como es del dominio público, desde su llegada al poder ordenó que se diera de baja a todos los “aviadores” de las dependencias de gobierno, lo que se ha hecho y se sigue haciendo, pero el efecto ¡ha sido más que positivo! El domingo advertí que en el Diario de Xalapa se publicó un anuncio que informa que “¡La mejor escuela de aviación llegó a Xalapa!”: se trata del Instituto Panamericano de Aeronáutica y Desarrollo que ofrece diplomados en “piloto aviador”, “oficial de operaciones aéreas” y “sobrecargo de aviación”. Si los maestros e instructores son los que quedaron fuera de las nóminas oficiales, entonces seguramente hay especialistas hasta en el aterrizaje de verdaderos jumbos y ya ni se diga de avionetitas y naves de mediano pelo. También ellas tienen lo suyo y por eso saben muy bien como ser “sobrecargos”… pero del erario.
El colega Edgar Hernández me invita para este medio día protestar en el parque Juárez por el cese que hizo la empresa MVS de la periodista Carmen Aristegui. Cuentan con toda mi solidaridad.
También quiero expresar mi solidaridad con la familia Malpica, de El Dictamen de Veracruz, y hacer pública mi protesta por la agresión que sufrió en su residencia el viernes la señora Karime Ahued Malpica a manos de un grupo de hombres armados. Debe investigarse y castigarse a los culpables.