Renato Tronco Gómez se vende a sí mismo como un líder carismático. De hecho lo fue, como cuando encabezó el movimiento “Unión de Ejidos 25 de Abril”, organización de campesinos que lideró y con la que obtuvo logros como construcción de caminos y otros beneficios para la región a principios de la pasada década.

 

Quien lo lleva a la política es primero Cirilo Vázquez Lagunes, el otrora cacique que dominaba una buena parte del sur de Veracruz a través de recursos públicos y el control de varios ayuntamientos. En ese entonces, Cirilo era la carta fuerte del panismo veracruzano encabezado por Alejandro Vázquez Cuevas “El Pipo”.

 

El panismo puede decirse que creció enormemente por la popularidad de Vázquez Lagunes, pero los conocidos excesos del “Cacique del Sur” terminaron estrepitosamente con varios ayuntamientos endeudados y escándalos financieros.

 

 Después Cirilo sería ejecutado por un comando el 19 de noviembre de 2006, cuando terminaba de ver un partido de beisbol de su equipo “Los Tobis”, llamados así en honor de su perro.

 

Otros de los fuertes impulsores de Renato Tronco Gómez, y quienes lo apoyaron política y económicamente, fueron los hermanos Roldán, conocidos empresarios transportistas y ganaderos radicados en Las Choapas y con fuertes lazos en las altas esferas del Partido Acción Nacional. Dicha familia mantiene un perfil bajo pese a su conocida fortuna.

 

Con el impulso de Cirilo al PAN y el apoyo político y económico de los Roldán (además del efecto del panismo que desplazó al corrupto priato con la imagen del bonachón Fox y Felipe “Manos Limpias”), Renato Tronco no tuvo dificultades para convertirse en alcalde de Las Choapas por el partido blanquiazul, siendo su primer periodo en el 2005-2007. Desde esa posición, Renato Tronco Gómez consolidó su liderazgo en la región, pero a la vez el poder lo embruteció.

 

El gran escándalo que lo persigue hasta el día de hoy, es su autoría intelectual en el asesinato del regidor primero Alfredo Pérez Juárez, originario de Tantoyuca, a quien no se le ha hecho justicia. De hecho, es a raíz del asesinato del regidor cuando se supo que Renato Tronco gobernaba de manera autoritaria y gustaba de ridiculizar y amedrentar con desplegados a sus detractores, como lo hizo con el profesor Pérez Juárez.

 

Éste incluso ya había contado a su esposa Orfelina Galindo Jaimes que había recibido varias amenazas de muerte de manera anónima y que temía por su vida.

 

No obstante, el valiente regidor no dejó de seguir señalando a la administración presidida por Renato Tronco Gómez por corruptelas como desvíos de recursos al Grupo SUMA (organización política leal a Tronco) y una existencia de “aviadores” en la nómina municipal, información que incluso pasaba a sus líderes partidistas en el estado, pero siempre fue ignorado.

 

Ese fatídico lunes 5 de junio del 2006, alrededor de las 9 de la mañana, Alfredo Pérez Juárez estuvo presente en el evento conmemorativo del Día Mundial del Medio Ambiente que se llevó a cabo en el parque central de Las Choapas. Realizó algunas actividades en el Palacio Municipal, hasta donde permaneció cerca de las 9 de la noche, cuando se retiró.

 

Fue alrededor de las 21:20 horas, cuando al abordar a su casa ubicada en la calle Luis Lara, de la colonia Agraria, fue emboscado por un gatillero quien le disparó 5 veces con una pistola Smith & Wesson calibre 9 milímetros.

 

Aún con vida (hay imágenes donde se aprecia al regidor sonriendo poco antes de ingresar a Urgencias) el edil fue llevado a un clínica particular de Las Choapas y posteriormente al Hospital de Especialidades Médicas “Valentín Gómez Farías” de Coatzacoalcos, donde a las pocas horas murió.

 

Hasta este lugar acudió Renato Tronco Gómez para expresar el pésame a la familia y hacer teatro de tristeza.

 

Pocos días después, en la madrugada del 9 de junio del 2006, en un impresionante operativo cerca de Acayucan, fue detenida una camioneta en la que viajaba el entonces alcalde Renato Tronco Gómez (quien venía del sepelio del regidor, realizado en Tantoyuca). La Policía Estatal y Ministerial aprehendía a sus escoltas: el inspector de Policía, Hormido Cruz Bustamante, a tres elementos municipales y a un civil identificado como Ignacio García Meza. El alcalde regresó solo a Las Choapas, no sin antes pasar a ver a Cirilo para contarle de lo ocurrido.

 

A Hormido Cruz Bustamante (originario de Piedras Negras, Tlalixcoyan, hermano del famoso gavillero “La Picuda”; ex delegado de Seguridad Pública Estatal, hasta que decide irse a servir a los intereses de Vázquez Lagunes, a quien tanto combatió y se metió al Partido de Acción Nacional) y a Ignacio García Meza (pistolero que cobraba en la nómina choapense bajo las órdenes de Renato) los acusaba la Procuraduría de Justicia como partícipes del asesinato de Alfredo Pérez Juárez.

 

Horas más tarde de ese mismo 9 de junio, fue detenido el secretario del ayuntamiento Octavio Orozco Salmerón, en un vistoso y aparatoso operativo que se realizó en el Palacio Municipal.

 

Según investigaciones y declaraciones de los inculpados, fue Octavio quien recibió la orden directa del entonces alcalde; luego llamó a su oficina a Hormido para comunicarle las instrucciones de Renato, y el jefe policiaco fue quien pidió a García Meza que ejecutara al regidor con la pistola 9 milímetros Smith & Wesson, con 12 cartuchos hábiles, que días antes le había quitado a un drogadicto. Meza fue quien declinó hacer el trabajo, pero dijo que conseguiría a otro asesino.

 

Todo apuntaba al presidente municipal de Las Choapas y esto se confirmó con la detención del autor material del crimen: el 26 de octubre, cerca de las 5 de la mañana, elementos de la Policía Ministerial de Veracruz y de Seguridad Pública del Estado realizaron un cateo en una parcela propiedad de Hormido Cruz Bustamante en el ejido Salitral, a un costado del poblado Número 1, del municipio de Ignacio de la Llave.

 

 

 Ahí detuvieron a Norberto del Valle Hernández, autor material del asesinato del regidor de Las Choapas, quien también acusaría a Renato Tronco de ser el autor intelectual.

 

Actualmente, sólo Hormido Cruz Bustamante e Ignacio Meza García son los únicos condenados por el asesinato y permanecen en prisión con una sentencia de 22 años.

 

 Octavio Orozco Salmerón, milagrosamente, logró un amparo y logró su libertad para después exiliarse en el Distrito Federal y venderse como “periodista”. Norberto del Valle falleció el 3 de agosto de 2008, supuestamente por complicaciones renales.

 

Con todo este drama, Renato Tronco nunca fue desaforado y todavía fue premiado con una diputación local bajo las siglas del PAN por el periodo 2007-2010, donde renunció al panismo y se declaró como diputado independiente, pero ya con muy obvia cercanía al PRI y al gobernador Fidel Herrera Beltrán.

 

Incluso en un informe de actividades legislativas, fue toda la plana mayor del priismo predominante en esa época para respaldar al “legislador independiente”.

 

La historia para Renato seguiría con una alcaldía (2011-2013) y una diputación local que actualmente ostenta bajo las siglas de la alianza PRI-PVEM, siempre con los mismos abusos y con agresiones fuertes al periódico Diario Presencia, que dirige el periodista Roberto Morales Ayala, uno de sus principales críticos.

 

Pero algo ocurrió y los caprichos de Renato Tronco echaron para abajo sus aspiraciones de cacique. Quizás el golpe más duro reciente fue que le quitaron la alcaldía a su hermano Miguel Tronco Gómez, misma que perdió ante Marcos Estrada Montiel; de ahí, una serie de desavenencias como el reciente bloqueo a la carretera Coatzacoalcos-Villahermosa, donde pedía de todo: justicia para los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, caminos rurales, apoyos para el campo, etc.

 

La realidad, apuntan algunas fuentes estatales, es que a Tronco le cerraron la llave del dinero desde la administración estatal y de paso le quitaron el respaldo político. No obstante, sigue pendiente el caso del regidor Alfredo Pérez Juárez, caso que fue desestimado en el Congreso porque argumentaron que los oficios de la Procuraduría de Justicia venían con los folios mal hechos.

 

De ahí llegamos hoy al oportunismo de Dante Delgado Rannauro, dirigente del partido Movimiendo Ciudadano (antes Convergencia por la Democracia), quien junto al diputado local Cuauhtémoc Pola Estrada, fueron al reciente informe de labores legislativas de Renato Tronco en Las Choapas. Sobra decir que buscarán integrar al choapense para el proyecto que encabeza Dante Delgado.

 

Curiosamente, a Dante también se acercaba Cirilo Vázquez Lagunes, a quien alguna vez le espetó que “él era político profesional y que mejor Cirilo se dedicaría a sus vacas”.

 

Pues vaya profesionalismo de Dante (y también de Cuauhtemoc Pola, por andar de porrista del choapense) que ahora quiere treparle a la izquierda tremenda alimaña en la figura de Renato Tronco Gómez. Por eso no es de gratis que el asunto de José Luis Abarca, el alcalde de Iguala, Guerrero, sea un golpe directo al PRD, la izquierda y de paso a Andrés Manuel López Obrador.

 

Y mire usted que si Tronco Gómez se une a las filas de la izquierda, luego entonces ojalá no estén llorando los fanáticos izquierdistas diciendo que la culpa la tiene el maldito gobierno represor del PRI, cuando son sus líderes partidistas los responsables de sumar asesinos a sus filas.